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viernes | 19 abril | 2024
La decisión de la Jefatura de Tráfico de implantar por primera vez las pruebas para la obtención del carné de conducir en el mes de agosto ha sido la salvación de la autoescuelas en el caso de A Coruña. Uno de los sectores más aquejados por la crisis económica, lleva años sufriendo varapalos viendo cómo cada mes se reduce más el número de alumnos en los centros. Según explica el presidente de la asociación de autoescuelas de la provincia coruñesa, José Manuel López Marín, el acuerdo con Tráfico y los profesionales para examinar durante el mes de agosto ha sido para nosotros un verdadero balón de oxígeno.
El presidente asegura que en los últimos años las autoescuelas de A Coruña hemos perdido entre un 80 y un 90% de alumnos, lo que asegura que es una cifra bestial e inasumible para la buena salud del sector. Por eso ve como una necesidad que se celebren las pruebas durante el mes de agosto ya que, tras la primera experiencia de este año, han visto cómo la cifra de matriculados en las autoescuelas crecía en una media del 30%, lo que ha supuesto un gran desahogo para los profesionales.
Jóvenes, sobre todo >La mayoría de quienes se han preparado para obtener el carné de conducir durante el mes de agosto han sido, como en años anteriores, los más jóvenes. Aunque este año hayan sido muchos más, el perfil de los alumnos, sin embargo, no ha cambiado. Son siempre estudiantes universitarios que aprovechan el parón de estudios del verano para sacarse el carné, apunta López Marín. El portavoz explica que con la adaptación de los estudios universitarios al Plan Bolonia, los exámenes de estos jóvenes finalizan en el mes de julio y las clases del nuevo curso vuelven a empezar a principios de septiembre, por lo que el tiempo libre que tienen para estudiar para el carné es muy reducido.
En este sentido, explica que para estos jóvenes es primordial que haya exámenes durante el mes de agosto, porque sino, no les merece la pena ponerse a estudiar, porque en septiembre ya están metidos de lleno en los estudios y no tienen tiempo de examinarse.
La obtención del permiso de conducir es para estos jóvenes o un premio, o una imposición por parte sus padres. López Marín explica que la gran mayoría de los alumnos que llegan a las autoescuelas durante el verano lo hace, principalmente, por estos dos motivos. Para quienes quieren el carné para lograr más autonomía o por una necesidad a la hora de desplazarse suele ser un premio que conceden los padres tras haber finalizado el curso escolar.
Sin embargo, acudir a la autoescuela durante el verano no es algo tan voluntario para todos. Hay padres que consideran que entre curso y curso sus hijos tienen que sacarse el carné de conducir, porque después, entre clases, exámenes y estudios no quieren que los jóvenes se distraigan con otras cosas.
Más de mil > Por eso, la convocatoria de exámenes durante el mes de agosto ha sido muy bien recibida entre los aspirantes a nuevos conductores.
Según los datos que maneja la Jefatura de Tráfico en A Coruña, sólo en la ciudad se han realizado 1.330 pruebas teóricas y 1.166 prácticas durante el mes de agosto, una cifra muy elevada para ser la primera vez que se celebran estos exámenes en el mes inhábil para la administración por antonomasia.
En esta cantidad se engloban todas las tipologías de licencia de conducción que concede Tráfico. Como es habitual, las cifra más elevada se corresponde con los permisos de conducción del tipo B, que habilita a conductores de turismos. Estos suponen el grueso del colectivo de nuevos conductores que se presentaron a examen, ya que fueron un total de 961 en un solo mes.
Les siguen los aspirantes a conducción de motocicletas, con 146 pruebas de destreza en pista, y los conductores de vehículos rígidos, que realizaron 46 pruebas prácticas. Por último, el colectivo menos numeroso lo componen los conductores de vehículos articulados, ya que sólo se presentaron 13 a examen.
