10º-19º
sábado | 20 abril | 2024
Tras el pleno extraordinario del viernes, la actividad municipal se reactivó el lunes con una nueva sesión, esta vez, ordinaria. Al igual que había ocurrido en la de principios de junio, en la que el PP aprobó en solitario y de forma inicial un modificativo de crédito de 3,4 millones de euros, los conservadores se volvieron a quedar solos ayer a la hora de ratificar definitivamente este ajuste en las cuentas municipales para 2012, que sirve para dotar con 890.000 euros las ayudas a rehabilitación o con 265.000 euros la promoción del comercio local en los barrios.
El pleno da luz verde al tercer modificativo de la era Negreira solo con los votos del PP
El concejal de Hacienda, Roberto Coira, justificó este cambio para “consolidar los presupuestos más sociales de la historia de la ciudad”, y acusó a PSOE y BNG de tratar de “retrasar y obstruir” la aprobación del modificativo presentando alegaciones al mismo. Este trámite obligó a llevar de nuevo a pleno el modificativo. Pese a esto, las alegaciones fueron rechazada al no ajustarse “a los preceptos que marca la ley”.
La misma suerte corrieron las presentadas por las asociaciones de vecinos Oza-A Gaiteira y Monte Alto, a las que Coira les sacó cierto parecido: “Son un copiar y pegar la una de la otra, incluidos puntos y comas”. En su defensa del modificativo, el edil de Hacienda no se olvidó del pleno de la semana pasada, en el que se aprobó aplazar a diez años el pago de las devoluciones al Estado, y en el que los socialistas acusaron a los concejales del PP de estar cobrando dietas por juntas y plenos extraordinarios. “Hoy (por ayer) tienen la opción de renunciar a las dietas de este pleno, así el coste para los coruñeses de la devolución sería cero”, retó el conservador a los concejales socialistas.
La “invitación” encontró respuesta en la portavoz del PSOE. “En la primera mitad del año solo fueron capaces de adjudicar una obra; deberían devolver lo que cobran”, afirmó Mar Barcón, que acusó al PP de estar llevando a cabo “una pésima gestión económica” y crear “redes de clientelismo” entre las asociaciones de vecinos al repartir de forma desigual las ayudas económicas incluidas en el modificativo.
Este mismo argumento fue uno de los empleados por la concejala del BNG Ermitas Valencia para rechazar el ajuste presupuestario: “Limítanse a mirar se as asociacións de veciños teñen o carné do PP, e as que non perséguenas como foi o caso de Palavea”. Para el portavoz de Esquerda Unida, César Santiso, la práctica del modificativo –recordó que el PP lleva tres en trece meses– “da conta da ausencia dun plan de acción”. n
