Los comerciantes desconfían de que las licencias exprés logren animar el sector

Los comerciantes desconfían de que las licencias exprés logren animar el sector

  La creación de un sistema de licencias rápidas para agilizar la apertura de pequeños comercios anunciada el pasado martes por el Gobierno central no será la panacea para revivir un sector muy mermado por los efectos de la crisis económica. Los comerciantes coruñeses creen que esta medida no servirá para que se pongan en marcha más negocios en la ciudad porque el verdadero problema es la caída del consumo. Además, en el Ayuntamiento ya funciona un sistema parecido desde el 2010 y pocos cambios podrían producirse ahora.

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, creía dar con la solución al problema del cierre de locales dedicados al comercio tradicional el pasado martes al anunciar que el Ejecutivo central tiene previsto crear una ley para agilizar la apertura de negocios. De seguir adelante con la norma, esta implicará que los permisos y la licencia de apertura pueda pedirse una vez que el establecimiento esté ya abierto, tras lo cual se vigilará que todo esté en orden. No obstante, muchos empresarios del sector no las tienen todas consigo. Los comerciantes de A Coruña descartan por completo que la iniciativa vaya a animar a empresarios y particulares a abrir nuevos comercios si no lo tenían previsto ya.

El Ayuntamiento dispone desde 2010 de un sistema similar por el que se han abierto 3.770 expedientes

 

Si bien es cierto que, en general, se muestran satisfechos de que por fin se tomen medidas para acelerar la burocracia y evitar engorros de papeleo que pueden retrasar una apertura incluso seis meses, no ven mucho futuro a la norma si la idea es que se muevan más locales. En este sentido se manifiesta el presidente de la Asociación de Comerciantes de la calle Barcelona, José Manuel Castro, que comenta que “todo lo que sean facilidades con los trámites es una buena idea”, si bien prefiere no valorar si eso generará interés por abrir más tiendas en la zona, con varios espacios vacíos.

El presidente de la Federación de Comercio de A Coruña, Miguel Agromayor, afirma que “esa no es la solución” e insiste en que la clave está en “reactivar el consumo”. En su opinión, es imprescindible que sigan existiendo “las inspecciones básicas”, pero con la norma que prepara el Gobierno estas se realizarían a posteriori.

“Tenemos precios y artículos inmejorables pero la gente no entra porque vamos hacia los cinco millones de parados y es lógico”, subraya el representante del sector a nivel provincial. Para él una propuesta útil sería potenciar el turismo en la ciudad, porque ese tipo de cliente es proclive a realizar más compras.

Por su parte, el presidente del área comercial Zona Obelisco, Antonio Amor, habla con conocimiento de causa por pertenecer a una de las zonas que está siendo más castigada por los cierres junto con la calle de Barcelona y recuerda que el papeleo no va a “quitar de abrir un negocio” a quién ya lo tenía previsto.

“Mientras no haya crédito la gente no se va a animar a montar negocios y, por ello, la medida no va a influir en la cantidad que se pueda abrir”, defiende Amor. En todo caso, el representante de los empresarios de las inmediaciones de la calle Real advierte de que actualmente ya hay “mucho comercio de hace 50 o 60 años que no tiene licencia de apertura porque antes no se pedía”.

 

Iniciativa local > Salvando las distancias con la propuesta de De Guindos, que contempla tramitar los papeles una vez abierto el establecimiento, en A Coruña ya existe algo parecido desde 2010. Por aquel entonces el gobierno bipartito creó un sistema para dar las licencias inmediatas en el momento en el que se entregasen todos los papeles.

Desde mayo de 2010 se abrieron un total de 3.770 expedientes por licencias de comunicación previa y declaración responsable. Unas 1.200 fueron permisos para iniciar la actividad y el resto para realizar obras de acondicionamiento de locales.

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