Los asistentes sociales preparan el informe previo a los realojos del Agra dos Mallos

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  l.f. > a coruña

  El Ayuntamiento ultima los trámites para proceder al realojo de los vecinos que aún quedan en el entorno del Agra dos Mallos, después de que desde la Concejalía de Urbanismo se decidiera trasladar el caso a los servicios sociales municipales, con el fin de dar una salida a las precarias condiciones en las que habitan en la actualidad. Así, el departamento que dirige Silvia Longueira, ya ha comenzado a estudiar los casos uno por uno para elaborar un diagnóstico del entorno familiar, que servirá para ofrecer una solución adaptada a cada afectado.
“Se elabora un informe social de cada una de las familias, para poder ofrecer alternativas ‘a la carta’ en función de factores como la renta o el número de miembros de cada casa”, indicaron fuentes municipales, que no concretaron los plazos en los que estarán listos estos documentos, si bien indicaron que “será lo más pronto posible”.
En la actualidad, en este ámbito, que se inscribe entre la avenida de Arteixo, detrás del centro cívico, y la calle de Puerto Rico, residen ocho familias en casas de una o dos plantas, que se encuentran en muy mal estado de conservación y sin apenas servicios básicos, como saneamiento o luz. Los inquilinos esperan desde hace décadas noticias sobre el desarrollo del polígono y sobre qué pasará con ellos una vez arranque el proceso, si bien estas no acaban de llegar.

Junta de compensación > El Ayuntamiento siempre dejó claro que es la junta de compensación la que tiene que gestionar el realojo de estas personas, pero sus precarias condiciones vida son las que han propiciado la intervención municipal. Con todo, desde el ejecutivo local advierten de que en caso de que los vecinos se acojan a las medidas de urgencia planteadas, “perderán los derechos adquiridos hasta ahora”.
La asociación de vecinos de Os Mallos, que preside Aída Antón, se encarga de las conversaciones entre la administración y los propios afectados. La solución municipal, para aquellos que se acojan a ella, pasará probablemente por facilitarles un piso en régimen de alquiler reducido, tal como ya se ha hecho en otras ocasiones en otras zonas de la ciudad. Mientras esto no llega, sin embargo, desde el ejecutivo local advierten de que los inquilinos de cada vivienda tienen que cumplir con la obligación de mantener las casas en condiciones mínimas de habitabilidad.

Plan General > La marcha de los residentes dejaría el camino libre a los promotores para la urbanización de la zona. La planificación prevista por el PGOM de 1998 para el Agra dos Mallos no resultaba “muy realizable”, según las palabras de la propia Taboadela. Esta circunstancia provocó, en cierto modo, el escaso interés de la iniciativa privada en este lugar y, en consecuencia, la parálisis de las decisiones a adoptar sobre los inquilinos. Ahora, el nuevo plan –pendiente de aprobación definitiva–, ha introducido varias modificaciones en el entorno que, a juicio de la edil, lo convertirán en “atractivo” para los promotores.
Las líneas de actuación pasan por la ampliación del centro cívico de Os Mallos, la edificación de áreas residenciales y la extensión de zonas verdes. A ello habrá que sumarle la cercanía de la futura estación intermodal y el recién creado barrio de Vioño, que bajo el punto de vista de los responsables locales, “despertarán mucho interés para llevar a cabo distintos proyectos”.


 

Los asistentes sociales preparan el informe previo a los realojos del Agra dos Mallos

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