Los alumnos de Arquitectura se unen para proponer mejoras en la escuela

Todo nació de la mano de un grupo ya desaparecido, que le pasó el testigo a los actuales responsables. El proyecto inicial ha cambiado de manos, de nombre y hasta de forma de plantar el trabajo, pero la finalidad continúa intacta: desarrollar una herramienta con la que, a través de propuestas individuales, se logre dinamizar el entorno.

Ese entorno es la Escuela Técnica Superior de Arquitectura y, los promotores, sus alumnos. De su creatividad y su ganas de poner en práctica y sus ganas por poner en práctica su inquietud creadora nace “Le! Laboratorio Extraordinario”. No es una agrupación, no es un colectivo. Ellos mismos subrayan que Le! es “una herramienta a disposición de los alumnos para convertir la escuela en nuestra escuela, a través del debate, la participación y el consenso”.

iniciativas

A través de varias fases, en las que el entorno web cobra gran protagonismo, los alumnos plantean, proponen y publican las ideas de mejora que consideran todos los participantes. Los grupos de acción toman entonces las riendas de proyecto para trasladarlo del papel a la realidad. En ellos se debate y se deciden las intervenciones que se llevarán acabo. Por último, y para cerrar todo el proceso, se concluye con la realización de las actuaciones. De esta última fase han surgido ya varias iniciativas que ya se han convertido en sendas realidades. Entre las más actuales, la creación de una biblioteca, Le! Biblioteca, en la que los propios alumnos favorecen el intercambio virtual y gratuito de ejemplares que puedan resultar de su interés. Los propios organizadores lo han definido como “proyecto abierto de biblioteca colaborativa como plataforma de recopilación de libros y publicaciones open-source, trabajos académicos y todo tipo de material audiovisual”.

Además, de esta propuesta, los integrantes del laboratorio han desarrollado desde finales del pasado curso Le! Columpio y Le! Pizarra. El primero es proyecto de “apropiación por parte de los alumnos de la escuela, intentando que esta y todos sus rincones, no sean simplemente lugares de paso, sino lugares amables y que los alumnos sienta como propios”. Ubicado en los exteriores de la planta -2, está hecho con materiales reciclados.

El segundo es una idea que promueve el uso del vehículo compartido para que los estudiantes acudan al campus.