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jueves | 25 abril | 2024
El aeropuerto de Alvedro mantiene un crecimiento de pasaje sostenido, pero dentro de un margen limitado, debido a la escasa cartera de conexiones con las que cuenta la terminal. El contraste a esa parálisis en nuevas incorporaciones a la parrilla lo ponen Lavacolla (Santiago) y Peinador (Vigo), que hace unos días estrenaban nuevas rutas por todo lo alto. Mientras en la mayoría de los aeródromos españoles se suceden las incorporaciones para turistas y empresarios, los coruñeses ven limitada su capacidad de volar desde su ciudad porque las múltiples negociaciones en las que se escuda el Ayuntamiento no han llegado a fructificar en ningún caso hasta el momento.
El pasado lunes 27 de marzo el aeropuerto de Santiago realizó el tradicional bautizo de agua a un avión de la aerolínea Lufthansa, que a partir de ese mismo día lanzaba los puentes aéreos entre Lavacolla y Fráncfort y Múnich hasta cuatro veces por semana. En esa presentación, los responsables de la empresa alemana aseguraron que venían con el objetivo de quedarse en el “mejor aeropuerto” de Galicia. Así, destacaban el poder llegar a una ciudad con una infraestructura aeroportuaria de “cinco estrellas”.
Justo un día después el alcalde de Vigo, Abel Caballero, daba la bienvenida por todo lo alto a la nueva conexión Vigo-Edimburgo, que operará Ryanair, después de haber incorporado a la oferta Milán, Bolonia y Dublín.
Lufthansa se escapó
Ajeno a las novedades permanecía, y así sigue, Alvedro, dado que no ha habido ningún anuncio por parte de ninguna compañía aérea ni del Ayuntamiento. En numerosas ocasiones el concejal y presidente del Consorcio de Turismo, Alberto Lema, aseguró que existen negociaciones con empresas para implantar nuevas conexiones pero lo cierto es que nada llega a plasmarse en la realidad y el aeropuerto coruñés se queda parado mientras sus dos principales competidores cogen impulso para acelerar el crecimiento.
El Ayuntamiento dijo haber negociado con Lufthansa para que se volase a Fráncfort desde A Coruña pero, finalmente, la compañía eligió Santiago. También se habló con Air Lingus en Dublín, pero esta ya es una habitual de Lavacolla durante parte del año.
Con menos rutas
En este contexto, el aeropuerto compostelano conecta con 29 ciudades, el de Vigo tiene ocho rutas fijas y A Coruña cuenta con seis, que a su vez están duplicadas o, incluso, triplicadas en la comunidad autónoma.
De hecho, desde que la Marea llegó al Gobierno local solo se sumó a la parrilla Valencia (que estaba parcialmente negociada de antes) y desaparecieron las líneas a Bilbao y París-Orly. l
