La tragedia del Orzán marca el acceso de Iglesias a jefe superior de Policía

El nuevo jefe Superior de la Policía Nacional en Galicia, Jaime Iglesias, ha tomado hoy posesión del cargo en un acto marcado por la tragedia ocurrida el pasado viernes en el playa coruñesa de Orzán, en la que un policía murió y otros dos desaparecieron al tratar de auxiliar a un joven en dificultades.

Iglesias ha iniciado su intervención expresando su "pesar" por este suceso y ofreciendo su "incondicional apoyo" y el del Cuerpo a las familias de los agentes, y ha señalado que su toma de posesión "requiere urgencia" por la falta de localización de los dos compañeros y del joven eslovaco desaparecidos.

El nuevo jefe superior de la Policía Nacional en Galicia, que sustituye en el cargo a Luis García Mañá, quien lo desempeñó durante los últimos siete años, ha destacado que los "factores clave" para el logro de objetivos pasan por la "armonización de las relaciones profesionales y humanas con otros operadores policiales para evitar la dispersión de recursos".

Además, ha defendido "el mayor acercamiento posible a los agentes sociales y un trato interno más humano", y ha comprometido la "lealtad" del Cuerpo a la autoridad judicial y fiscal y la "transparencia" con los medios de comunicación.

Entre los principales objetivos que se fija al frente del Cuerpo en Galicia, Iglesias ha destacado la lucha contra la delincuencia de carácter urbano y atender especialmente a los delitos de mayor daño social.

Además, ha anunciado el reforzamiento de la lucha contra la delincuencia organizada, tanto el terrorismo como el narcotráfico que, ha advertido, en Galicia "tiene una presencia singular".

"En resumen, buscaremos mantener la positiva tasa de criminalidad en Galicia", ha apostillado Iglesias.

El jefe superior de la Policía Nacional de Galicia ha esperado a la parte final de su intervención para volver a referirse a los "héroes" del Orzán, y ha afirmado que "los ecos del silencio, del sacrificio y de la heroicidad se hacen a veces voz y pregón que trasciende del quehacer profesional para inundar de ejemplaridad los espacios que el hombre transita en la quietud diaria".

Iglesias ha asegurado que el gesto de los policías que trataron del salvar al joven eslovaco en la playa del Orzán "se ha tornado antorcha y faro y es el camino a seguir cuando la sangre incontenible de la entrega del servicio a los demás se hace patente en acciones en las que la propia vida se ofrece a cambio de la satisfacción y el orgullo del deber cumplido".

"Unos miembros del Cuerpo Nacional de Policía en servicio en ya una imborrable madrugada, que quedará en los anales de la historia corporativa de esta ciudad, arriesgaron su vida para salvar la de otros, y uno de ellos la ha perdido y a otros dos los tenemos desaparecidos", ha declarado.

Por último, ha proclamado que "en el aire queda su respiración, los latidos de sus tres corazones y el transparente mensaje de su valentía, de su entrega y de su heroicidad".

Por su parte, el delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez, ha manifestado su deseo de que el acto de toma de posesión de Iglesias se convierta "en un homenaje a los tres policías de la playa del Orzán y a la labor callada del conjunto de la Policía española".

"A las fuerzas de seguridad les debemos mucho porque nuestros derechos y libertades sólo se garantizan desde la seguridad", ha asegurado Juárez.