La primavera más lluviosa en cincuenta años da paso a un verano con más agua

Las playas coruñesas, ya en perfecto estado de revista, tendrán que esperar para recibir a los bañistas. Si ayer los socorristas, en su primer día de servicio de la temporada, vigilaban a las decenas de personas que disfrutaban del calor primaveral, en los próximos días podrían encontrarse solos en los arenales. Las previsiones meteorológicas apuntan a que el sol que lució ayer será una suerte de oasis en medio de semanas de cielos grises y precipitaciones.
La primavera más húmeda de los últimos cincuenta años –con más de 441 litros por metro cuadrado de precipitaciones acumulados– se despedirá, según la predicción de MeteoGalicia, siguiendo la misma línea que ha mantenido estos meses: amenazando lluvia, con temperaturas más bajas de lo deseable para esta época del año y con nubes.
Esta misma tarde habrá que cambiar el traje de baño por el paraguas y no soltarlo hasta el martes. La tregua apenas durará una jornada; se espera que el miércoles el agua vuelva a hacer acto de presencia para, de nuevo en alternancia, irse un día después y volver al siguiente. Así, el verano entrará entre nubes cargadas de lluvia y con grandes variaciones entre las temperaturas máximas y las mínimas, que pasarán de los 22 grados en las horas de más calor a los 11 del principio y el final del día.
Algo más de estos once grados (13,3) es la media de temperatura de esta primavera, inferior a la del año pasado –que rozaba los quince–, aunque en el rango normal respecto al calor en las últimas décadas.
El principal quebradero de cabeza, sin duda, ha sido la lluvia.  A pesar de que en estos tres últimos meses se han registrado menos días de chubascos que, entre otros, el año pasado (12,5 de media, frente a 14,7 en 2012), las precipitaciones han sido más abundantes. Los 237,4 litros por metro cuadrado recogidos en marzo son todo un récord y anunciaban que los chubasqueros iban a seguir fuera del armario durante un tiempo. En abril y mayo, con cerca de cien litros por metro cuadrado recogidos, la sensación de lluvia constante ha sido la tónica general, que parece que continuará este mes de junio, donde ya se han contabilizado 13,4 litros.
441 litros acumulados que están muy lejos de los 336 que se registraron en el período entre 1961 y 1990 y más aún de los 321 entre la década de los setenta y los 2000 en Galicia.
Unida al frío y al agua, la humedad también ha calado más en esta estación que en otras de años anteriores. La media de estos meses es de un 74,5 por ciento, frente al, por ejemplo, 72,2 de la misma época del año pasado y del anterior en la ciudad.

llega el sol
Con esta tendencia presente, habrá que mantener la esperanza y la paciencia hasta el tercer día de verano, el domingo 23, primera fecha en la que las previsiones del servicio meteorológico gallego muestran sol.
Veintiún grados de temperatura máxima y once de mínima, si las predicciones no se equivocan, serán suficientes para pisar las playas coruñesas por primera vez este verano. nw