La normativa sobre obras será revisada

Mientras que la Policía Local acordonaba la zona, Protección Civil se encargó de organizar el traslado de los residentes del número 31. Con la mayoría, como fue el caso de los estudiantes de la Academia Nebrija, la evacuación no fue un problema, pero algunos de los vecinos eran gente mayor y algunos tenían problemas de movilidad, así que se solicitó la asistencia de Cruz Roja. La organización humanitaria envió hasta tres vehículos de transporte adaptado a la avenida para recoger a los ancianos, aunque en realidad no fue necesario emplear más que uno. Bajo la supervisión de la jefa del servicio de Protección Civil, María José Rodríguez –que al igual que Touriñán se desplazó desde el dispositivo de rastreo del Orzán–, un puñado de personas fue trasladada al centro de día de Cruz Roja, que se encuentra en la sede provincial de esta entidad, en el Campo de Marte. Allí permanecieron durante el mediodía hasta que volvieron a ser trasladadas por los voluntarios de la organización humanitaria hasta la misma puerta de sus casas, una vez se les informó de que había pasado el peligro.

La normativa sobre obras será revisada

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