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jueves | 25 abril | 2024
La terminal de cruceristas que el Puerto había previsto construir en el centro de ocio de Alférez Provisional, hoy conocido como Los Cantones Village, no pudo llevarse a cabo por un cambio de la normativa internacional de recepción de pasajeros. Por tanto, pese a que la Autoridad Portuaria posee hoy en el interior de las instalaciones 375 metros cuadrados, no los pudo utilizar para el fin que deseaba y, en su lugar, tuvo que levantar un pequeño edificio de una planta en el muelle de Trasatlánticos.
El Puerto desmiente la información publicada ayer por el periódico La Opinión A Coruña y aclara que su intención era reservar un espacio del edificio participó con 1,1 millones de euros en el proyecto para instalar en él los servicios destinados a los viajeros, que van desde la vigilancia y control del equipaje a la información turística.
Pero el atentado de las Torres Gemelas provocó una modificación en el código internacional para la Protección Marítima de los Buques y de Instalaciones Portuarias (PBIP) y un área comercial dejó de ser el lugar idóneo para este fin.
La nueva normativa entró en vigor el 1 de julio de 2004 y la obra fue recibida por el Puerto el 27 de julio de 2005. Fuentes portuarias aseguran que el espacio ya no era adecuado y su intento de modificarlo para cumplir con los nuevos requisitos internacionales era muy complicado.
De este modo, se apostó por erigir otras instalaciones acordes con el proyecto Alas de Gaviota que costaron 751.219 euros. Si Palexco y el centro comercial fueron diseñados por Ricardo Bofill y César Portela, este nuevo edificio también se le encargó al arquitecto gallego.
Alquilado > Además, el organismo portuario insiste en que hoy en día todavía es propietaria de esas instalaciones. De hecho, este espacio ubicado en la planta baja de Los Cantones Village está alquilado al Ayuntamiento como oficina municipal de rehabilitación es donde los vecinos se informan de las ayudas para la instalación de ascensores.
La Autoridad Portuaria dispone de este espacio en el centro de la ciudad gracias a su contribución de 1.117.217 euros al proyecto. Para ello, el organismo firmó un convenio en el año 2000 con la Xunta y el Ayuntamiento, los otros dos inversores. El gobierno gallego aportó la mayor parte del coste, 10,8 millones de euros, y el ejecutivo municipal, otros tres.
Este acuerdo aclara los usos del proyecto que, además de un recinto para la recepción de pasajeros, debía contar con 9.000 metros cuadrados destinados a Palacio de Congresos, lo que hoy es Palexco, y otros 1.200 de sala de exposiciones, que se encuentra en el piso superior de este mismo inmueble.
Inversión > Así, ante el importante avance que este tráfico ha experimentado durante los últimos años, la Autoridad Portuaria apostó por construir otra terminal de pasajeros que posibilitase el avance de este negocio en auge.
Desde el mes de mayo ya está en funcionamiento bajo la gestión de Corunna Cruise Terminal, firma formada por Rubine e Hijos y Pérez y Cía.
