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jueves | 25 abril | 2024
El edificio administrativo de San Caetano, en Santiago, acogió ayer la reunión del comité de empresa de la Fábrica de Armas con el conselleiro de Industria, Francisco Conde. La entrevista tenía como objetivo acordar una alternativa industrial que evite el cierre de la Factoría.
El presidente del comité de empresa, Roberto Teixido, calculó que se tardará entre dos y tres semanas en redactar un plan de viabilidad para incorporar a la planta de Pedralonga al sector civil y mantener los 69 puestos de trabajo de los empleados que no han firmado la baja incentivada.
Una vez esté redactado el documento, se presentará a General Dynamics, si la multinacional americana lo considera viable, y si el Ministerio de Defensa cede los terrenos donde se encuentra la fábrica, esta podría continuar abierta. Es en esa posibilidad donde cifran sus esperanzas los trabajadores. “Polo momento, os compañeiros se manteñen a expectativa”, explicó Teixido.
Es un cambio importante después de meses de lucha, cuando solo faltaban unas horas para el plazo límite, la mayoría de los 130 trabajadores firmaron la baja incentivada que les ofrecía la empresa, para evitar un proceso de despido forzoso que les resultarían aún más perjudicial.
El resto, los 69 trabajadores que decidieron resistir, se animó cuando se supo que los despidos se retrasarían hasta el 30 de junio en vez de comenzar el pasado día 10 y más aún cuando la semana pasada, el comité de empresa obtuvo por primera vez un acuerdo verbal de la multinacional americana para valorar un nuevo proyecto industrial.
Pero ya entonces, el alcalde, Carlos Negreira, que Teixido señaló como uno de los que más se implicaron en la lucha por mantener abierta la Fábrica de Armas había señalado que “es una buena noticia”. “Pero ahora hay que trabajar mucho para conseguir un proyecto viable”, comentaba el regidor.
El Ayuntamiento trabaja con la plantilla y la Xunta para elaborar el modelo que permita reconvertir la Fábrica de Armas, que aún forma parte de Santa Bárbara Systems, al sector civil, quizá en la producción de piezas mecanizadas para el sector aeronáutico o los tratamientos térmicos superficiales, según aventuró Teixido.
Por su parte, el alcalde señaló que existe una oportunidad para mantener el empleo industrial y “poder ir a más, si sabemos trabajar bien”.
Y es que si al final, General Dynamics accediera a mantener abierta la planta, esta podría despegar en su nueva andadura y recuperar los puestos de trabajo perdidos. Sobre todo, porque existe la posibilidad de la cesión del equipamiento de alta tecnología por parte de la multinacional, Eso supondría un “custe cero” en tecnología para esta nueva etapa.
