La Consellería do Mar reabre la ría de O Burgo, cerrada desde hace tres meses por marea roja

  Los mariscadores denunciaban hace unos días que la presencia de los furtivos en la ría era más peligrosa de lo habitual porque, además de la presencia de la bacteria de fecales E.coli, algo habitual en O Burgo, los bancos marisqueros estaban afectados por  marea roja. Ahora ya no es el caso. El Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño de Galicia (Intecmar) decidió el miércoles levantar el cierre por toxinas lipofílicas, que son las que provocan las mareas rojas.
La resolución del 14 de abril por la que se prohibía extraer marisco del estuario no afectó a la cofradía, puesto que el plan de explotación de este año no prevé faenar en O Burgo hasta el otoño, pero los trabajadores alertaban de que esta situación sí podía provocar problemas de salud pública por la venta de marisco ilegal.
De hecho, este mismo martes, con la llegada del buen tiempo, los furtivos regresaron a la ría. Según los mariscadores, eran alrededor de una quincena los que estuvieron faenando a última hora de la tarde. La consellería admite que se está detectando un repunte propio de los meses del verano y asegura que por este motivo se están incrementando los medios en el entorno de O Burgo. Fuentes de la Xunta explican que hasta ahora la presencia de los guardacostas era menor de lo habitual en el estuario porque se logró rebajar el problema del furtivismo con el nuevo sistema de operativos puntuales coordinados con los Cuerpos de Seguridad del Estado.