La consellería comenzará a analizar los bivalvos a finales de la próxima semana

  La Conselleira do Mar, Rosa Quintana, llegó al paseo de O Burgo acompañada, ente otros, de la directora del Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño de Galicia (Intecmar), Covadonga Salgado, y tras los saludos oficiales entre los compañeros lo primero que hicieron al llegar a la zona afectada fue hablar con los miembros de la cofradía. Allí, Salgado fue la responsable de explicar a los mariscadores cuál sería el proceso a seguir a partir de ahora. La experta explica que se dejarán pasar unos días para iniciar las analíticas para evitar el “pico máximo” de acumulación de toxinas.
En concreto, parece que las primeras muestras se tomarán a finales de la próxima semana y los resultados tardarán al menos otros siete días en conocerse, por lo que es seguro que la campaña marisquera no se retomará durante este proceso.  
Salgado aclara que las pruebas para detectar la presencia de hidrocarburos son más complicadas que las de biotoxinas, por tanto, también más lentas. En el lado positivo, la responsable autonómica afirmó que esta es una zona muy controlada por el problema de contaminación que sufre y en la que se conoce el nivel de hidrocarburos que posee habitualmente, así, será fácil reconocer el daño causado por el queroseno.
En cualquier caso, desde el instituto se comprometieron a mantener informada a la cofradía de los resultados obtenidos y de las medidas que se deban tomar al respecto.

Demandas > Los miembros de la cofradía estaban acompañados por el secretario comarcal de la CIG, Paulo Carril, que aprovechó la conversación para reclamarle a la conselleira más celeridad a la hora de ejecutar el plan de saneamiento local de la Xunta, que se encuentra en fase de redacción. En este sentido, Rosa Quintana recordó que precisamente este mes hay prevista una reunión con los responsables del Ministerio de Medio Ambiente para tratar la cuestión del dragado del fondo de la ensenada. El Gobierno central asegura que dispone de un proyecto de este tipo que no ejecutará hasta que el ejecutivo autonómico se responsabilice de los lodos.