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jueves | 25 abril | 2024
La CIG ocupó ayer una oficina de empleo del barrio de Monelos para protestar por la reforma laboral. Los sindicalistas criticaron la reforma que “constitúe o maior ataque infrinxido a clase obreira dende a Transición”. Una vez dentro de la oficina, desplegaron una pancar en la que se leía “Coas políticas do PP, os pobres máis pobres e os ricos máis ricos”.
El rechazo de la CIG es tan rotundo como el de los sindicatos nacionales UGT y CCOO, que también realizaron movilizaciones durante la semana pasada pero, por el momento, las tres organizaciones no han podido ponerse de acuerdo para realizar actuaciones conjuntas. Suso Seixo, secretario general de la CIG, se limitó a recordar que “esta reforma non vai axudar a cración de empleo senon que, pola contra, vai mudar o traballo fixo por temporal e otra traballo con dereitos por outro mais precario”.
El sindicato nacionalista pretende movilizar a la ciudadanía de cara a la huelga general convocada para el próximo 29 de marzo, y la acción de ayer era una forma de iniciar la campaña.
Empresarios > Pero la de la oficina del INEM no fue más que una de una serie de actuaciones que se llevaron a cabo en diferentes ciudades gallegas. En Santiago de Compostela, la concentración se celebró ante la sede de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), a la que los reunidos calificaron de “cueva de Alí Babá”. Tras una pancarta con la leyenda “Contra la reforma laboral, huelga general”, también corearon consignas como “no faltan dinero, sobran ladrones”, “reforma laboral, terrorismo patronal”.
Sobre las alternativas de la CIG, el sindicato apuesta por una reforma fiscal en profundidad para que el aumento de recaudación se enfoque hacia donde están los recursos. En este sentido hay muchos temas pendientes, como la carga impositiva de las SICAV, los topes máximos de IRPF o la reducción llevada a cabo en el impuesto de sociedades o la recuperación del impuesto sobre la herencias, por ejemplo.
