La acusada por la amenaza de bomba en el consistorio de Arteixo niega que la llamada de aviso fuese suya

“Yo no hice la llamada, tengo la conciencia muy tranquila”, afirmaba ayer en el juzgado de penal 5 la joven acusada de una amenaza de bomba en el ayuntamiento y el centro cívico de Arteixo. Los hechos, acaecidos en octubre de 2009, son constitutivos de un delito de desorden público que podrían suponer una pena de nueve meses de prisión para la procesada, que en todo momento negó la autoría de la llamada e incluso alegó que no estaba en su puesto de trabajo cuando esta fue realizada.

La joven aseguró una y otra vez en su declaración que ella no había sido la autora del aviso, realizado en nombre del Exército Guerrilheiro do Povo Galego y que obligó a desalojar a más de 70 trabajadores de las dependencias municipales arteixanas. La acusada sí reconoció, no obstante, que había tocado el teléfono desde el que se efectuó la llamada –que pertenecía a una compañera que estaba tomando un descanso– para comprobar si este funcionaba.

También explicó que la relación con la empresa era “muy buena” hasta el día del incidente y que le acababan de renovar el contrato. Una afirmación que desmintió el encargado de la firma, quien confirmó que habían hablado días antes con la acusada para comunicarle “que esa misma semana iba a dejar de trabajar”. Sin entrar a valorar si la llamada se había realizado por despecho, el encargado afirmó que el día de autos los trabajadores salieron a la calle para hacer un descanso, salvo tres personas, entre ellas, la ahora procesada.

 

pruebas concluyentes

Por su parte, las compañeras que se quedaron en la oficina con la acusada ofrecieron dos versiones muy similares, en las que certificaron que había cogido el teléfono de la mesa contigua al tiempo que decía “este tampoco funciona”, aunque negaron haber oído a la joven realizar la llamada de amenaza.

Es por ello que el abogado de la defensa, el letrado José Ramón Sierra, mantiene que no existe ninguna prueba “concluyente” de que su representada hubiese efectuado la comunicación, ya que los guardias civiles que respondieron a la misma registraron el número pero no grabaron la conversación. n

La acusada por la amenaza de bomba en el consistorio de Arteixo niega que la llamada de aviso fuese suya

Te puede interesar