9º-16º
martes | 23 abril | 2024
En la Semana de la Insuficiencia Cardíaca, el jefe del servicio de cirugía cardíaca del Chuac, José Joaquín Cuenca, habla sobre las enfermedades cardiovasculares y sobre las innovaciones que se están dando en el sector.
¿Qué es una enfermedad cardiovascular?
Una patología que afecte a cualquier parte del corazón o de las arterias y venas.
¿Qué índice de mortalidad tiene?
En las edades más avanzadas, estas enfermedades tienen el mayor índice de mortalidad en el mundo occidental, tanto en hombres como mujeres. No tanto en los países en desarrollo porque hay mortalidades más precoces.
¿Cuál sería esa franja?
A partir de los 65 años es cuando la incidencia crece de forma exponencial.
Principales factores de riesgo.
Hay una suma de los típicos factores de riesgo, como el tabaquismo, la hipertensión arterial, la hipercolesterolemia, la diabetes y la vida sedentaria, que supone sobrepeso. Además, está la predisposición genética. Cada uno debe controlar los factores de riesgo que tiene para disminuir el impacto de estas alteraciones.
¿Qué se recomienda para prevenir este tipo de enfermedades?
Sobre todo, la vida sana. Esto significa tener una vida activa y tener un peso dentro del margen correcto. Además, de vez en cuando controlar la tensión, el colesterol y el azúcar. Según los resultados, el médico te dirá qué tipo de estilo de vida, de dieta y, finalmente, de medicación. Nunca hay que empezar por la medicación sin intentar hacer modificaciones en el estilo de vida o la dieta. Si se hacen modificaciones en estos aspectos, si se necesita medicación será en dosis más bajas.
¿Piensa que estos valores deberían inculcarse desde la escuela?
Lo más urgente es que dentro de alguna asignatura se imparta, a largo plazo, formación en cultura de la salud. Tendría impacto en la vida familiar y, poco a poco, cambiaría la concienciación de la población. Es más rentable económicamente tomar medidas para proteger la salud que tratar la enfermedad. Además, atender la patología es ineficiente porque no se logran corregir todos los daños.
El Chuac se erige como referente en cardiología, ¿a qué es debido?
Tanto cardiología como cirugía cardiaca son dos servicios que siempre han intentado estar a la vanguardia de cualquier innovación en el tratamiento de estas enfermedades.
¿Y qué es lo más novedoso?
Hace cinco años que incorporamos unas válvulas para tratar las enfermedades de la válvula aórtica, que es la puerta de salida de la sangre del corazón. Esas válvulas cuando se deterioran, fruto de la edad, hay que sustituirlas y crear unas válvulas artificiales, como unas puertas nuevas que abran y cierren de forma correcta. La innovación ha llevado a poner en el mercado unas válvulas biológicas que no se sujetan mediante suturas, sino que se sujetan mediante unos “stent”. Permiten que se puedan implantar en pacientes de cualquier edad mediante mini incisiones con una cirugía más rápida y menos agresiva.
¿En qué porcentaje las usáis?
En un porcentaje altísimo, casi en el 85 o 90% de los pacientes.
Ventajas e inconvenientes con respecto a otras válvulas.
Respecto a las válvulas metálicas, la ventaja es que no tomaría sintrom. En relación al resto de válvulas biológicas que se implantan con suturas, son cirugías más largas y agresivas que la explicada anteriormente. Por tanto, es una cirugía más sencilla y rápida, de dos horas, que permite no dar tratamiento anticoagulante. Reúne todas las ventajas de lo que se busca en las válvulas del mercado.
¿Cómo está avanzando la innovación en este campo?
La innovación va por todos los campos de la medicina y en los quirúrgicos tiende a diseñar dispositivos que permitan que los procedimientos sean menos agresivos en términos de menos incisiones y más rápidos y seguros de hacer.
