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viernes | 19 abril | 2024
La calma que normalmente rodea la Torre de Hércules se vio quebrada ayer cuando una de las personas que subían al faro romano resultó ser una suicida, que se sentó en el parapeto que rodea la terraza del mirador. Eran las once de la mañana y los turistas dieron la voz de alarma. Poco después, varios agentes de la Policía Nacional y Local subían apresuradamente los escalones que llevaban a la cúspide. La mujer seguía allí, con los pies colgando en el vacío, así que trataron de distraerla hablando con ella. Cuando vieron la oportunidad, la agarraron y la pusieron a salvo. Para conseguirlo, tuvieron que romper unos barrotes que protegían un sumidero que daba al vacío.
Varios policías hablaron con ella hasta que pudieron agarrarla
Abajo esperaba una dotación de bomberos, así como del 061, aunque no hizo falta que intervinieran, puesto que la mujer se encontraba bien físicamente. Las autoridades la identificaron como Silvia B.F., de 35 años, de nacionalidad brasileña.
recurrente
Según informaron fuentes de los servicios de emergencia, la mujer se encuentra en situación de exclusión social y no es la primera vez que exhibe tendencias suicidas. De hecho, hacía dos días que había sido dada de alta en el Hospital de Oza, después de protagonizar un hecho parecido.
La mujer es una sin techo, que duerme habitualmente en el Refugio de Padre Rubinos. No es raro entre los indigentes sufrir trastornos mentales agudizados en algunos casos por adicciones como al alcohol.
