La hostelería recibe al buen tiempo sin noticias de las licencias de terrazas

El peor de los temores de los hosteleros coruñeses para este verano se ha hecho realidad: la temporada alta del terraceo ha comenzado sin que el Ayuntamiento haya remitido las licencias para colocar el mobiliario en la vía pública a la gran mayoría de los establecimientos. El sector confía en que el Gobierno local tenga un poco de manga ancha con las terrazas teniendo en cuenta que los problemas han sido de índole burocrática y no empresarial, pues las solicitudes se cumplimentaron en diciembre de 2015 y los locales están al corriente de los pagos.
El buen tiempo ha llegado a la ciudad –parece que esta vez para quedarse– sin que el Consistorio haya dado el visto bueno a las terrazas. Casi seis meses después de enviar toda la documentación requerida, los hosteleros carecen de información sobre la situación de sus expedientes y se encuentran en una situación alegal. Antes de que lleguen los turistas y con los coruñeses ávidos de unos rayos de sol, la mayoría de los empresarios ha aprovechado estos días para sacar sillas y mesas a las calles con ciertos riesgos.
Cuando en diciembre pasado pidieron poder ocupar una parte de la vía pública ya abonaron las cuotas correspondientes al espacio que demandaban a la Concejalía de Movilidad Sostenible. Sin embargo, sin los permisos correspondientes tienen solo parte del proceso hecho y, por consiguiente, el malestar es generalizado.

menos personal
Una de las consecuencias del parón que sufrieron las negociaciones que se iniciaron en septiembre de 2015 es que se haya contratado algo menos. Según relataban desde los establecimientos hace meses si no contaban con la pertinente documentación no podrían ampliar las plantillas para atender a los clientes que se asentasen en el exterior como ha ocurrido.
Además, la supuesta falta de agilidad en la gestión municipal ha impedido la renovación y equiparación del mobiliario. La Asociación de Hostelería de A Coruña presentó en su día un catálogo con tres propuestas de distintos rangos de precios para que el Gobierno municipal los homologase sin obtener respuesta alguna.