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miércoles | 24 abril | 2024
Desde hacía mucho tiempo se venía hablando de la necesidad de hacer una extensión de la línea de los tranvías de A Coruña para que pudiesen llegar a la villa de Sada y prolongar luego su recorrido hasta la ciudad de los Caballeros. Esto último nunca sucedió, pero el proyecto existió aunque nunca se llevó a efecto por cuestiones económicas y de rendimiento empresarial.
En 28 de abril de 1915, el Ayuntamiento trató la prolongación de la línea del tranvía a Sada. El consejo de administración de la Compañía de Tranvías se dirigió al Consistorio para que apoyara la gestión, que venía haciendo en la Diputación provincial, para que esta garantizara parte del capital que había de invertirse en las obras de la línea hasta Sada.
El 6 de diciembre de 1916 acordaron que los alcaldes concurrirían a la asamblea que se celebraba en A Coruña para tratar de este establecimiento de la línea del tranvía eléctrico a Sada. Fue el 29 de noviembre de 1919, cuando el gobernador civil trasladó la Real Orden de aprobación del proyecto de tranvía eléctrico de A Coruña a Sada, de fecha 27 de octubre, bajo las condiciones que se expresaban en el escrito.
La instalación de este recorrido sería largo en el tiempo y corto en su periodo de funcionamiento. Se llevaba hablando desde 1902 de hacer una línea de tranvías a Sada, dando las obras por finalizadas en 1922 y estableciendo en Carballo las cocheras, talleres y subestación eléctrica, donde llegaron a trabajar más de 40 operarios. También se situó allí la casa-vivienda del jefe de estación.
La línea fue inaugurada de modo parcial en 1922, alcanzando Fonteculler y San Pedro de Nos. A finales de ese mismo año quedó oficialmente inaugurada la totalidad de la línea Coruña-Sada.
Secciones del recorrido
El 1 de enero de 1923 quedaron establecidas ocho secciones del recorrido que debía hacer dicho tranvía, el cual salía de Puerta Real y paraba en el apeadero de García Prieto (hoy Avenida de Oza), de allí a Os Castros, As Xubias, Pasaje, Fonteculler, O Burgo, El Temple, San Pedro de Nos, Carballo, Piñeiro, Castelo, Seixido, Tarabelo y Sada, con parada final al pie de su famosa terraza.
A aquel tranvía se le llegó a conocer de forma popular bajo el nombre de “Siboney”, en recuerdo de la manigua cubana del que hacía servicio desde La Habana. Aquí recibió el mismo nombre por salir de A Coruña y recorrer los pueblos del entorno antes de llegar a Sada.
Final del servicio
El tranvía a Sada funcionó hasta 1956, que con motivo de las fuertes pérdidas económicas acumuladas que soportaba esta línea, se decide su abandono y, a finales del mismo año, en su lugar comienza a funcionar una línea de autobuses que unen aquella villa marinera con A Coruña. Las líneas que hacían este recorrido eran las marcadas con los números 5 y 6, el primero con final en San Pedro de Nos.
La línea 5 salía de Puerta Real, cada 24 minutos y recorría avenida de García Prieto, As Xubias, Fonteculler y San Pedro de Nos. La línea 6 también salía de Puerta Real hacía el mismo recorrido pero con parada final en Sada. La primera salida de A Coruña para aquella villa marinera era a las 08.00 horas y la última a las 21.36 horas, a diario, con 12 servicios de ida. De Sada, el primero salía a las 08.12 horas y el último a las 23.50 horas hacia A Coruña, contando con 12 servicios desde A Coruña y 14 desde Sada. Los domingos se reducían solo a tres viajes de ida y otros tantos de vuelta.
Esto permitía hacer contadas excursiones a diversos lugares que quedaban dentro de la ruta, como era el poder visitar el lugar de As Xubias y su sanatorio de Oza, O Burgo, subir la Cuesta de la Tapia o visitar El Temple y parar para tomar algo en bar El Tranvía de San Pedro de Nos, un lugar siempre concurrido de gentes que llegaban para tomar el tranvía en alguna de las direcciones y hoy en la absoluta ruina de un edificio con tanta historia popular. También se podía parar en Piñeiro, visitar Oleiros, donde estaba el ramal central y tras pequeñas paradas intermedias o llegar a la hermosa villa de Sada.
Esto es todo lo que hay de una memoria colectiva de cuando el tranvía de A Coruña a Sada era una epopeya de viajar, un tiempo ya muy lejano que dejó por el camino innumerables recuerdos a mucha gente que trabajando sus tierras saludaban al “Siboney” al verlo pasar. Otros muchos fueron sus propios viajeros en su ajetreada vida de ir y venir de un lado a otro por muy diversos motivos. Pero para todos ellos quedó el recuerdo añorado de que un día hubo un tranvía que saliendo de A Coruña, llegaba a la villa marinera de Sada y desde allí regresaba a la urbe cosmopolita en que se había convertido esta ciudad.
