Sobrevive a una caída desde un quinto piso

Un hombre de 27 años resultó herido ayer de carácter grave tras precipitarse a la calzada cuando estaba limpiando los cristales de su casa, en un quinto piso del número dos de la calle de Manuel Pose. El herido, que fue identificado como J.G.Q., tuvo que ser operado de una fractura en la pierna en el Complejo Hospitalario Universitario, donde pasó la noche en reanimación. El accidente causó un gran sobresalto porque el joven cayó por una ventana que daba a la avenida del Ejército, y en su trayectoria arrancó una rama gruesa de un plátano antes de desplomarse sobre el capó de un turismo para, finamente, permanecer tendido en el espacio comprendido entre dos vehículos, alarmando tanto a transeúntes como a los empleados de los negocios que daban a esa calle.

El accidentado fue intervenido de una rotura en una pierna y permanece ingresado en el Chuac

\“Después de caer, seguía consciente –aseguraba uno de ellos– y le dio a alguien el número de teléfono de su padre para que le avisaran de lo que había sucedido\”. Los testigos se dieron cuenta de que se trataba de un accidente porque, junto con el joven, había caído a la acera un bote de líquido limpiacristales. Al parecer, la víctima se había asomado al alféizar para poder limpiar el lado exterior, sentándose para llegar más lejos y, en un momento dado, había perdido el equilibrio y caído de espaldas.

\“Se puede ver en el capó la huella que dejó\”, indicaba otro testigo. Un tercero recuerda que \“se encontraba muy pálido e impresionaba verlo con las piernas torcidas, de una forma poco natural\”. Los mismos testigos afirman que, por la posición, el joven cayó directamente de espaldas y trazando uan trayectoria curva, lo que probablemente fue la causa de que se golpeara con el árbol y arrancara la rama. \“Eso lo salvó, seguro, porque evitó que fuera a parar directamente a la acera, y en cambio cayó en el coche\”, opinaba uno de los transeúntes.

Policía Nacional > Tras el primer aviso, inmediatamente acudieron al lugar de la caída, situado justo delante de una sucursal de la cadena de electrodomésticos Lux, varias unidades de la Policía Nacional, así como una ambulancia del 061, pero no fueron los servicios de emergencia los primeros en auxiliar al joven.

Cerca del lugar de los hechos se encuentra la Mutua Fraternidad, uno de cuyos médicos acudió a atenderle mientras llegaba la ayuda. \“Estuvieron cerca de veinte minutos atendiéndole\”, recuerdan los empleados de Lux, que relatan que el joven había dicho a los que lo socorrían que \“no podía mover las piernas\”. En cuanto los sanitarios determinaron que era posible moverle con seguridad, lo subieron a la camilla y lo trasladaron en la ambulancia al cercano Hospital, dejando en la acera la rama del árbol y el coche dañado como pruebas de la violencia del impacto y que se daba la casualidad de que pertenecía a uno de los empleados de la empresa de electrodomésticos.