Dos grandes ejemplos del intelecto coruñés

Dos grandes ejemplos del intelecto coruñés

Traemos al recuerdo dos grandes intelectos de la ciudad coruñesa, cada uno en su campo cultural, Luis Dequidt y Fernando Arenas Quintela.

luis dequidt
Fue un afamado profesor y empresario de la enseñanza, fundador del colegio Dequidt, que se ubicaba en lo que hoy es la plaza del Libro. A este centro se accedía por Juan Flórez, por la calle que lleva su nombre. 
Nace este inquieto maestro en la villa francesa de Walloncappel, lugar próximo a la frontera belga. Se traslada a Ferrol alrededor de 1850, instalándose en la ciudad departamental, donde abre una escuela de Primaria que unos años más tarde convierte en un centro de estudios de Secundaria. Se asocia con otro maestro y empresario con el concurso de su esposa, la maestra Victoria Hevia, con la cual se había casado en Ferrol en 1854. Dicho colegio funcionó con gran éxito por espacio de veinte años.
En los albores del año 1871 aparece Luis Dequidt regentando un colegio de La Coruña ubicado en la calle Real, en el que ejercen la docencia su esposa y su cuñada. Vive en las plantas superiores con los cuatro hijos habidos del matrimonio. El centro estaba adscrito en principio al Instituto de Santiago y en 1877 logra incorporar los estudios al de La Coruña, que ya gozaba entonces de carácter provincial, impartiendo la enseñanza mixta a los estudiantes masculino y femenino.
Luis Dequidt fallece en su domicilio de la calle Real en 1885 y tras ser enterrado en el cementerio de San Amaro el colegio pasa a ser dirigido por su hijo mayor, Luis Dequidt Hevia, que lo traslada a un nuevo local en la calle de Juana de Vega, donde permanecerá hasta 1900. En tanto se había logrado construir la nueva sede colegial, en una amplia finca situada encima de la calle de Juan Flórez. Este colegio funciona hasta el año 1970, en que la especulación urbanística convierte aquel solar en zona edificable y con calles transitadas.
También sería muy meritoria la labor desarrollada por otro de los hijos del fundador, Enrique Dequidt Hevia, director del nuevo colegio y un gran innovador en el terreno pedagógico, a quien le suceden en el cargo, sus hijos Luis y José Dequidt Carreras-Presas, dirigiéndolo hasta que cierra sus puertas.
Actualmente la calle de Enrique Dequidt Hevia recuerda a aquella institución colegial y a toda la laboriosa rama familiar, representada en uno de sus ilustres hijos.

Fernando Arenas Quintela
Nace este difusor de la cultura, en la coruñesa plaza de María Pita el 17 de junio de 1929. Cursa carrera en la Escuela de Estudios Mercantiles y con 19 años comienza su etapa laboral en la librería Porto, de San Andrés. Allí descubre el fascinante mundo del libro y su contenido social y cultural, de cuya faceta no se separará. Contrae nupcias en 1956 con doña Teresa Roca López. De su inquietud empresarial, nace en 1958 la librería Cervantes, en el bajo de la casa donde había nacido. Esta pronto se convierte en el templo del saber de los coruñeses y una de las librerías predilectas de la ciudad. Allí se inicia la presentación de las diversas obras literarias con la firma de sus autores, además de celebrarse tertulias, debates y conferencias. 
Ante el éxito alcanzado y el buen recibimiento por parte de los coruñeses de un nuevo modelo de librería al alcance de todo el mundo, decide abrir en 1963 en el Cantón Grande la librería que bautiza de forma personal “Arenas”, y que ocupa el local que había pertenecido a la Imprenta de Zincke Hermanos. Ambas librerías, pronto se convierten en el nuevo palacio de la cultura de La Coruña, en donde se dan cita los numerosos autores que presentan sus obras al público, siendo además un importante polo de atracción por las conferencias de algunos renombrados escritores del momento.
Además Fernando Arenas es una persona comprometida en su asistencia a congresos y exposiciones que tienen lugar tanto en territorio nacional como en el exterior, siendo el primero en iniciar un 23 de abril la venta de ejemplares que bautizó como “Día del Libro”. Sacó a la calle los libros que estaban en las estanterías y dando otro aire, al acercar el libro al público viandante, colocó unos puestos en la plaza de María Pita y posteriormente también en el Cantón Grande, lo que constituyó una novedad en la forma de fomentar la lectura.
Este genio innovador del marketing editorial, forma parte de la corporación municipal en 1967, bajo la alcaldía de Demetrio Salorio Suárez, siendo nombrado, teniente de alcalde de Cultura. Siguió su etapa en el municipio bajo la alcaldía de José Pérez Ardá y López Valdivieso hasta 1974. Entre 1963 y 1972 será presidente del gremio de los libreros de España y también del Sindicato del Papel y Artes Gráficas. Debido a su incansable carácter emprendedor, funda en 1965 en La Marina Comercial Farenas, dedicada a máquinas de escribir, cintas, reparaciones etc. Así como a la venta de electrodomésticos.
El Ministerio de Información y Turismo le concede en 1971 el Premio Nacional al librero que mejor labor cultural realiza en España. A este galardón le siguen los concedidos por el Ministerio de Cultura de los años 1984, 1985, 1987 y 1989. 
Será el promotor del monumento dedicado al Libro en los jardines de Méndez Núñez, primero de este tipo erigido en España y obra del escultor orensano Buciños, de la exposición del “Quijote en el Mundo”. También impulsó la primera Feria del Libro celebrada en La Coruña y las primeras juntas de vecinos que en 1967 comenzaron a funcionar en la ciudad.
En la última etapa de su vida, Fernando Arenas destaca en una meritoria faceta cultural, la edición de libros de obras gallegas y en especial en temas coruñeses, así como grabados y fotografías, siempre pensando en el lector, pero en particular en el historiador e investigador como los más interesados en el conocimiento de la historia. 
Curiosamente la primera edición en 1963 sería la de “Asterix” en lengua gallega, lo que constituyó un gran éxito. Luego vendrían en la década de los ochenta, una retahíla de títulos de todos los gustos y géneros que llegaron a ser auténticos éxitos de ventas en la librería Arenas.
Fernando Arenas fallece en pleno vigor de su etapa cultural y social; su óbito acontece en la madrugada del 21 de agosto de 1990, cuando apenas contaba 61 años, estaba en la flor de su expansión cultural y era apreciado por todos los coruñeses, a los que había inculcado el arte de la lectura habitual a través del libro. 
En definitiva un gran librero coruñés. Para conocer su figura solo queda Recomendar la lectura de “Fernando Arenas en el recuerdo” de Carlos Fernández Santander.

Dos grandes ejemplos del intelecto coruñés

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