11º-16º
martes | 16 abril | 2024
Gonzalo Trenor (Ribadeo, 1977) tomó este septiembre posesión de su cargo como nuevo delegado territorial de la Xunta en A Coruña. .
¿Le ha dejado Ovidio Rodeiro algún camino a seguir o le ha advertido sobre algún asunto concreto?
Ovidio lo que me dejó fue el listón muy alto. El anterior delegado estuvo presente en todos los municipios y no abandonó ninguna de las áreas, es un referente para mí. Tengo mucha suerte por el trabajo de Ovidio Rodeiro, pero también por el de Belén Docampo y de Diego Calvo.
¿Qué objetivos se marca?
El principal es contribuir a solucionar la mayor cantidad posible de problemas, favorecer el diálogo y la coordinación de los ayuntamientos con la administración autonómica y, por supuesto, colaborar todo lo necesario en los problemas derivados del Covid-19.
Donde no reina el entendimiento es en el dragado de la ría de O Burgo, a pesar de que tanto la Xunta como el Estado quieren que se lleve a cabo.
Aquí no hay un conflicto entre administraciones, las competencias están claras y son del Estado. Esta semana nos han demostrado que nos han mentido una vez más. Cuando ya creíamos que estaba todo encauzado, porque ya había un presupuesto por parte del Estado y se complementó con fondos de la Unión Europea por idea de la Xunta, el delegado del Gobierno hizo alusión a que faltaba un certificado, pero lo que faltaba era su respuesta a las alegaciones del proyecto. Lo que queda ahora es licitarla y es algo que el Estado tiene que hacer si quiere de verdad hacer esta obra. Da la sensación de que el Gobierno central está tratando de marear y confundir, no sabemos con qué finalidad pero yo me temo que con la peor: no ejecutar el dragado. Después de haber hecho la Xunta una inversión de más de cien millones en saneamiento y de implicar a todos los ayuntamientos limítrofes, después de aprobarse la declaración de impacto ambiental y de contar con los fondos, empiezan a enredar.
Su llegada se produce en tiempos convulsos y desde el inicio del curso se suceden las quejas por el protocolo de la Xunta para evitar contagios en centros educativos.
Nosotros hemos aplicado siempre las instrucciones del Ministerio. Tenemos más de 140.000 personas en la comunidad educativa, de los cuales 137.000 son alumnos, y tenemos más de 700 centros, así que imagina la cantidad de incidencias que puede haber, y en año como este más. Los profesionales de educación están trabajando por mejorar y solucionar todas las incidencias que se puedan dar.
El Ayuntamiento coruñés criticaba que la Xunta no asume la limpieza de los centros escolares.
La limpieza corresponde en unos centros educativos al Ayuntamiento y en otros a la administración autonómica. En los que compete a la Xunta se ha reforzado el servicio de limpieza y lo normal es que en los centros donde tiene competencia el Ayuntamiento, sea el Ayuntamiento quien refuerce la limpieza. Así de simple y de sencillo. La comunidad autónoma está haciendo un esfuerzo ingente para combatir esta crisis, hemos contratado a más de 2.000 profesores de refuerzo y estamos solucionando los problemas con las concesiones, por ejemplo, de comedores o transporte.
¿Cómo avanza la construcción del nuevo Chuac?
Es un proyecto vital para nuestra ciudad. Ahora mismo hay más de 8.000 profesionales vinculados a ese hospital, su presupuesto representa casi el 10% de todo el presupuesto de la Xunta. Que acertemos ahora condicionará lo que va a ser A Coruña dentro de unas décadas. Ha habido varias reuniones con el Ayuntamiento y se ha enviado una propuesta de convenio, ahora estamos esperando respuesta pero nos manifestaron su acuerdo y esperamos que se pueda llevar a cabo pronto.
¿Cree que la intermodal será una realidad próximamente?
Me alegro de que esta semana el Gobierno central se haya puesto de acuerdo con otras administraciones para avanzar en el convenio, pero no estoy tan contento con el retraso que lleva. Hace un año ya que el delegado del Gobierno anunció la licitación de las obras de la estación ferroviaria y seguimos esperando, sin un solo argumento que justifique el retraso. Aquí se hacen anuncios de licitación cuando hay un proceso electoral y después no se cumplen.
Sobre Alu Ibérica. Los trabajadores dicen que la Xunta no hace todo lo que está en su mano para garantizar su futuro. ¿Qué opina?
Cuando en 2019 se cerró el acuerdo entre Alcoa y Parter dijimos que se trataba de un cierre en falso, puesto que la clave tiene que ser que haya un precio competitivo de la electricidad. Alemania o Francia tienen un precio que es la mitad que aquí. La solución viene de la mano de un marco energético estable y el Gobierno dijo en varias ocasiones que iba a dar una solución y no ha sido así. Madrid tiene que cumplir con lo que anunció.
La llegada de los buses metropolitanos a Entrejardines no ha supuesto una reducción significativa de vehículos en Alfonso Molina. ¿A qué cree que se debe?
El transporte público ahora está sufriendo los efectos del Covid-19 y puede que ahora haya más uso del vehículo propio. La apuesta por el transporte colectivo es total y, fruto de ella, nacen políticas como las bonificaciones o la mejora de las líneas con polígonos, hospitales o universidades. El uso del autobús se ha incrementado un 30% en la última década.
La Vía Ártabra avanza, pero es un tema que levanta ampollas en según qué municipios.
Nosotros para elaborar los proyectos nos dejamos guiar por los equipos técnicos y aquí lo que debe prevalecer es el interés general por encima del particular. El trazado que proponemos es el más seguro y el que perjudica a menos vecinos.
