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sábado | 20 abril | 2024
Alvedro vivió ayer un día especial... y no porque se anunciara un nuevo vuelo o porque comenzasen nuevas obras para mejorar la terminal. La celebración fue más bien familiar, literalmente, porque 40 gallegos emigrados a Uruguay se reunieron con sus familias gracias al programa “Reencontros na Casa” de la Xunta. La sala de llegadas se convirtió en un remolino de abrazos y recuerdos y alguna que otra lágrima cayó.
Pudo ser la de Antonio, que acudió con su mujer a recoger a un allegado que viajaba desde Montevideo, o la de Manolo, que con las prisas para achuchar a una visita tan poco habitual solo acertó a contar que ya la habían recibido en otras ocasiones.
Porque hay quien ya repite en este programa –eso sí, el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, se encargó de puntualizar que siempre tienen prioridad aquellos emigrantes que todavía no han venido– y, si lo hace será porque volver a la tierra merece la pena.
“Yo tengo que ir hasta Santiago porque mi familia está allá pero aún así lo vivo con mucha emoción, se te pasan muchas cosas por la cabeza”, reflexionó Teresa Piñeiro nada más bajar del avión procedente de Uruguay. “Tengo mucha morriña, ahora somos viejos”, añadió.
Teresa ya estaba conquistada porque su corazón es gallego pero la carga sentimental de este destino ha conseguido que otros se rindan a sus encantos. Sin ir más lejos Élida Modernell: “Mi esposo es español y ya es la cuarta vez que viajamos porque todos nuestros hijos se vinieron para acá; me encanta Galicia”.
Rodríguez Miranda aprovechó el acto de recepción para recordar que “é un orgullo mantener este programa que é unha prestación de carácter social”. Aseguró que están “tratando de manter os fondos axustando algo nas plazas” y recordó que en octubre llegarán más viajeros para el “Reencontros na Terra”. n
