Las fuertes rachas de viento tiran un árbol en el barrio de Los Rosales

La alerta amarilla decretada para ayer tanto en la costa como en tierra dejó paso a una jornada agitada, sobre todo, al mediodía donde se registraron las rachas de viento más fuertes. Desde la estación de Bens de MeteoGalicia, apuntaron las 13.40 horas como el momento más venteado, en concreto, se llegó a los 84,6 kilómetros por hora. La inestabilidad se dio entre las 10.50 y 15.30 horas cuando se superaron ráfagas de 60 kilómetros por hora. 

En esta franja horaria se acumularon una serie de incidentes menores, que movilizaron a los Bomberos. Aún así, lo más grave fue la caída de un árbol en Los Rosales, de lo que se hicieron eco los usuarios de las redes sociales, que colgaron las fotos del ejemplar tirado sobre la hierba. A pesar del impacto, la especie arbórea fue rápidamente acordonada para que no ocasionara problemas. 

La plaza Elíptica fue escenario de más intervenciones a causa de ramas que se precipitaron al suelo y pusieron en peligro a los viandantes. 

Al mismo tiempo, el Ayuntamiento cerraba la Torre de Hércules al público porque la meteorologúa era adversa y hacía difícil el acceso al faro. 

Por otra parte, los Bomberos acudieron a una casa en la plaza de Alfonso XIII porque el viento rompió el tendal, situado en la terraza. La unidad desplazada tuvo que utilizar una escalera porque no había una forma de llegar directa. En la calle de Orillamar, retiraron unas uralitas en el tejado de un patio interior que amenazaban con caer y a eso de las dos de la tarde, la Policía Local registró la caída de más ramas, esta vez, en los jardines del Rectorado. 

En otro orden de actuaciones, a las 16.00 horas, los Bomberos fueron a un domicilio a José Cornide por el incendio de la campana extractora. Desde la sala de pantallas, informaron de otras salidas por culpa de vallas y contenedores que invadieron la calzada. 

Por otro lado, en Alvedro, la actividad fue normal y no hubo desvíos porque la dirección del viento era favorable para tomar tierra. En cuanto a la lluvia, en la ciudad se acumularon hasta las diez de la noche, un total de 11,6 litros por metro cuadrado, siendo el máximo apogeo entre las cinco y las seis de la tarde. Aunque no estuvo relacionado con el mal tiempo, hasta diez trenes de media distancia sufrieron retrasos por la tarde por un fallo en la catenaria, en el tramo entre Santiago y Vigo, según informó Renfe.