Un fuego en Afundación provoca una gran humareda y obliga a evacuar el edificio

Un fuego en Afundación provoca una gran humareda y obliga a evacuar el edificio

Un fuego de origen eléctrico causó ayer la alarma en el edificio de Afundación. El incendio se declaró a las once de la madrugada, en el nivel -5, y fue el origen de una gran humareda que se extendió por todo el emblemático edificio de Os Cantones y obligó a evacuarlo. El equipo de emergencias sacó a la calle a 50 personas mientras los bomberos se encargaban de sofocar el fuego. El entorno era peligroso, porque el nivel estaba inundado y había varios transformadores y generadores, pero tras extinguir el fuego, se procedió a las labores de ventilación de todo el humo, que concluyeron alrededor de las doce y media de la tarde, aunque el edificio permanecerá cerrado hasta el lunes. 
“Estábamos tranquilamente en la planta baja cuando notamos como había humo en el aire”, explicó una testigo. La estructura del edificio, muy abierta, favorecía que la humareda se extendiera, así que unos pocos empleados bajaron al sótano, al subnivel 5. “Abrimos la puerta y salió mucho humo, así que decidimos evacuar”, explican. La maniobra estaba ensayada y salió perfectamente. Además, en ese momento el auditorio estaba vacío y no había mucha gente, de ahí que solo fueran 50 personas, muchas de ellas trabajadores y otras participantes en una jornada sobre comunicación que se tuvo que trasladar al Ieside, las que tuvieran que salir a la calle. 
En unos minutos aparecieron dos dotaciones de bomberos, que entraron en el edificio y bajaron las escaleras. El humo era para entonces tan denso que fue necesario que emplearan equipos de respiración autónoma. 
Los bomberos tuvieron que chapotear por el agua que habían arrojado los aspersores del sistema antiincendios, en medio de la oscuridad y del humo tratando de orientarse como mejor podían. “Era como un laberinto”, comentaron. Además existía el peligro muy real de la corriente eléctrica, porque había varios generadores eléctricos y conducciones de alta tensión. Finalmente, encontraron el origen del fuego: un transformador del que salían llamas: fue necesario vaciar dos extintores de CO2 en polvo para sofocarlas. 
“Al final, hubo suerte, porque podía haber sido mucho peor”, comentó un bombero. La disposición del edificio contribuyó a las labores de extinción porque evitó que el calor y el humo se concentraran en un punto pero cuando fue necesario ventilar el lugar, la labor se prolongó durante una hora, con los ventiladores funcionando a pleno rendimiento en la fachada que da Los Cantones mientras que la otra salida, la de la calle Estrella, permanecía cerrada.
Debido a los daños en el sistema eléctrico, el edificio permaneció sin electricidad. Este problema, junto con el persistente olor a humo y el hecho de que el subnivel cinco permaneciera inundado, ayudó a decidir que la sede de Afundación permaneciera cerrada durante el resto del fin de semana. 

Un fuego en Afundación provoca una gran humareda y obliga a evacuar el edificio

Te puede interesar