Flores asegura que la ordenanza de terrazas se acordó con los hosteleros

En el Ayuntamiento no entienden la petición de los hosteleros para que no se cobre la tasa de terrazas por ocupación de la vía pública. Al menos eso es lo que se desprende de las palabras del primer teniente de alcalde, Julio Flores, que ayer calificó de “poco razonable” que “a estas alturas”, con la normativa en vigor desde junio, se solicite la suspensión de este impuesto municipal que afecta al sector de la hostelería.
Flores subrayó ayer que la nueva normativa, que se aprobó este año, contó con el “acuerdo” de los hosteleros. En ese documento, que modifica la formar de entender las terrazas en la ciudad y establece nuevos criterios para regular la instalación de este mobiliario en la vía pública, se fija el cobro de una tarifa por espacio ocupado en la calle. Según el portavoz municipal, esas tasas son “muy razonables”, por lo que considera que el acuerdo que se alcanzó con el sector “es justo” y “hay que respetarlo”.
“No son buenos tiempos para nadie”, respondió el primer teniente de alcalde a las declaraciones del presidente de la asociación de empresarios de hostelería de A Coruña, Héctor Cañete, después de que se escudase en la “crisis del sector” para demandar ante el Ayuntamiento la suspensión de la tasa de terrazas durante el período de adaptación de los hosteleros a la nueva normativa.
“Santiago, Vigo o Lugo tienen unas tasas muy superiores”, manifestó Flores, que recordó que ya se establecieron mecanismos para tratar de que los empresarios del sector conozcan y se amolden a la norma, como la ampliación hasta el 15 de marzo del plazo para solicitar la licencia, o el período de carencia que se estableció hasta 2015 para adaptarse “a las cuestiones estéticas” que fija la ordenanza.

recaudación
La demanda de los hosteleros también motivó las críticas del BNG. Los nacionalistas denunciaron que, durante 2013, “a recadación líquida pola taxa de ocupación da vía pública con terrazas é de cero euros, segundo a relación de ingresos dos orzamentos do 2014”, pese a que las terrazas “proliferaron a ollos de todas as coruñesas e coruñeses”.
En el BNG se quejan de que la asociación de hosteleros de A Coruña “pretenda eludir o pagamento das taxas por ocupar espazos públicos oa instalar terrazas”, cuando “o pobo coruñés paga escrupulosamente os seus impostos municipais con independencia da súa situación económica”. Entienden que el gobierno local “xa está a ser perigosamente flexíbel á hora de cobrar esas taxas”, y se preguntan “que máis quere esta entidad”, ya que a principios de año, el equipo de Negreira “consensuou e pactou a nova ordenanza de terrazas”.
“Para a asociación provincial xa nada é suficiente”, alertan en el BNG, que alegan que en la ordenanza “xa se facilita a instalación de terrazas en prácticamente calquera lugar” tal y como pedía el sector. n