Ferreiro abre la puerta a una moción de confianza como mecanismo para aprobar las cuentas

La Marea contempla la posibilidad de plantear una moción de confianza como mecanismo para aprobar los presupuestos municipales en caso de que la oposición los frene en el pleno. El alcalde, Xulio Ferreiro, apuntó ayer que este “es un instrumento más” y “si es necesario se utilizará”, aunque confió en que no lo sea.
El tiempo de negociación de los presupuestos municipales se le echa encima al Gobierno local, que debe acelerar las conversaciones si quiere llegar a principios del próximo año con un acuerdo que garantice el sí a las cuentas en la cámara municipal. Por eso, la Marea tiene en cuenta “todos los posibles escenarios” en el caso de que no consiga el apoyo de los socialistas.
La experiencia de lo sucedido con las cuentas de este año, tumbadas por la oposición después de que la Marea las llevase al pleno sin contar con el apoyo previo necesario para su aprobación, hace que el equipo de gobierno analice todas las posibilidades. En caso de que la historia se repita y los presupuestos municipales no consigan los votos necesarios, la convocatoria por parte del alcalde de una moción de confianza abriría un período de treinta días en el que los grupos de la oposición tendrían la posibilidad de plantear una moción de censura. Dado que, a priori, no hay ningún partido interesado en someter al Gobierno local a esta reprobación, la consecuencia de la moción de confianza sería la aprobación automática de los presupuestos. Aunque estos podrían ser enmendados por la oposición, igual que sucedió este año.
De hecho, el proyecto inicial de la Marea quedó enmendado por el PP y por el PSOE hasta el punto de que el alcalde manifestó su descontento con el texto final aprobado, del que consideró que estaba lejos de la idea de su partido.
En cualquier caso, la necesidad de aprobar las cuentas municipales cuanto antes sería acicate suficiente para que la moción de confianza se contemple en las filas mareantes como una herramienta válida.
Precisamente, el concejal socialista José Manuel García, responsable de las negociaciones económicas con la Marea, había pedido expresamente al regidor que no presente una moción de confianza vinculada a la aprobación de los presupuestos en el pleno municipal en el caso de que no llegasen a un acuerdo. No obstante, igual que Ferreiro, mantiene la esperanza de que se llegue a un pacto previo que garantice una sesión plenaria sin sobresaltos.
Eso sí, el edil del PSOE no tiene claro que las cuentas puedan contar con luz verde a principios de 2017, toda vez que, indicó, su grupo todavía no tiene noticias de cuál es el proyecto de la Marea. Insistió en que la ciudad necesita un pacto de gobierno entre la Marea y el PSOE para poder funcionar y el acuerdo presupuestario podría ser el punto de partida.
Antes de llegar a ese punto hay otra votación pendiente en la que el equipo de Ferreiro necesita de los votos a favor de los socialistas: las ordenanzas fiscales. El PSOE coruñés tiene intención de darles el sí, a excepción de la subida del agua y presentando un voto particular para la bajada del IBI.