Fallece un niño de 12 años al precipitarse desde un sexto piso en Maestro Mateo

Un trágico suceso conmocionó ayer a los vecinos de la plaza del Maestro Mateo cuando, poco antes de las cuatro y media de la tarde, un niño perdió la vida al precipitarse desde el sexto piso del número 4 de ese inmueble. El pequeño, N.M.N., de solo 12 años de edad, cayó por el patio interior del edificio hasta una terraza situada en un segundo piso, muriendo casi instantáneamente.
Las autoridades tuvieron conocimiento de lo que sucedía pasadas las cuatro y veinte de la tarde, cuando el centro de coordinación de emergencias 112 recibió una llamada solicitando una ambulancia, informando que un niño se había caído por una terraza. El 112 envió hasta el lugar de los hechos una ambulancia medicalizada del 061 pero poco después su dotación les llamaban para informar de que la víctima había muerto y para solicitar un forense.
Al lugar de los hechos también acudió la Policía. Primero unidades del 092, que acordonaron la calle, ante la curiosidad del público que disfrutaba de la tarde soleada en la zona infantil, justo enfrente del edificio donde habían tenido lugar los hechos. Poco después hicieron acto de presencia los agentes judiciales de la Policía Nacional, así como una unidad uniformada. Mientras, la ambulancia se retiraba para dejar paso al servicio de la funeraria.

Investigación
Los agentes de la Policía Nacional tomaron declaración al padre, la única otra persona que se encontraba en el domicilio en el momento de los hechos puesto que la madre y el hijo de la pareja se encontraban fuera en ese momento. Aunque en un principio nada puede hacer sospechar que la tragedia fuera fruto de algo más que de una imprudencia infantil, el padre no pudo explicar las circunstancias que rodearon la caída de su hijo, porque en ese momento no se encontraba cerca de él. Es por eso que la Policía Nacional va a abrir una investigación que esclarezca cómo se produjo el siniestro.
A medida que se iba conociendo la noticia, tanto vecinos como conocidos y familiares se reunían cerca del portal esperando a que los servicios de emergencia terminaran su tarea, lo que dio lugar a algunas escenas de dolor en la calle. Después de que la jueza de guardia lo ordenara, se pudo levantar el cadáver de la terraza del segundo piso donde aún se encontraba hora y media después de que tuviera lugar el suceso, de manera que el cuerpo del pequeño fue trasladado por empleados de la funeraria Mémora. Enseguida llegaron los psicólogos enviados por el 061 para asistir a la familia golpeada por la tragedia . n