Envían a prisión a los detenidos por el atraco de Juan Flórez

Envían a prisión a los detenidos por el atraco de Juan Flórez
uno de los detenidos, ayer, en el furgón a teixeiro quintana

 La escopeta de cañones recortados que llevaba consigo uno de los dos hombres detenidos el domingo en la Falperra por el asalto que, minutos antes, había sufrido el establecimiento Opencor de la cercana calle de Juan Flórez, así como otras dos armas similares halladas por la Policía Nacional en los domicilios de los sospechosos, han llevado a la jueza que ayer les tomó declaración a imputarles, además del atraco, un delito de tenencia ilícita de armas.

Por estas infracciones, los dos cuadragenarios, ambos coruñeses y ambos con antecedentes policiales, han sido enviados a la prisión de Teixeiro, mientras se instruye la causa por delitos de robo con intimidación con uso de instrumento peligroso y tenencia de armas que, según la magistrada que ayer atendía el turno de guardia, se ve agravado porque estas habían sido modificadas.

Según informan desde el 091, además de la escopeta que uno de los sospechosos llevaba, cargada, en el regazo cuando la patrulla interceptó el coche en el que los asaltantes habían huido, en los domicilios se recuperaron otras dos armas similares, una de ellas repetidoras, un puntero láser para armas de fuego y munición, además de las secciones serradas de la culata y los cañones.

 

Colaboración > Aunque fueron patrullas de Seguridad Ciudadana, en apoyo a la Unidad de Delincuencia Organizada y Violenta de la Policía Nacional, las que localizaron y apresaron a los ladrones, la colaboración del vigilante del establecimiento 24 horas, así como de los empleados, resultó fundamental, según destacan desde este cuerpo.

Lo primero que hizo el miembro del equipo de seguridad fue telefonear a la Policía Nacional, justo antes de salir en persecución del hombre que, un momento antes, había entrado en el local con un pasamontañas y guantes y, con la escopeta en la mano, les había exigido a los empleados el dinero de las cajas.

“Esto no es una broma, dame el dinero o te mato”, les dijo el atracador, para conseguir que uno de los cajeros le entregase 800 euros. También este trabajador siguió a la carrera al delincuente, que llegó a ser alcanzado por el vigilante, si bien logró escapar y meterse en un coche que le esperaba en División Azul, con su cómplice al volante.

Los datos que el empleado dio por teléfono a la Policía acerca de la dirección que tomaba el vehículo, y la matrícula que facilitó otro ciudadano, permitieron a una patrulla de Seguridad Ciudadana localizarlo en pocos minutos, a eso de las siete de la tarde.

Cuando los agentes interceptaron el coche y le dieron el alto pudieron observar que uno de los delincuentes había empezado a cambiarse de ropa. Eso explica que, en el momento de la detención, estuviera desnudo de cintura para arriba.

En el registro al turismo, los funcionarios encontraron los guantes de plástico que el asaltante llevaba puestos cuando entró en el Opencor, y también varias prendas de ropa, una braga y un gorro negros. En los bolsillos de su pantalón localizaron los agentes los 800 euros en billete obtenidos en el atraco.

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