Entrañable celebración del 150 aniversario del Eusebio da Guarda

Entrañable celebración del 150 aniversario del Eusebio da Guarda
numerosas personalidades asistieron a la celebraciã³n quintana

La comunidad educativa celebró ayer el 150 aniversario del instituto Eusebio da Guarda en un acto al que también asistió el alcalde Carlos Negreira, el conselleiro Jesús Vázquez, el presidente de la Diputación, Diego Calvo; y el delegado de Gobierno, Samuel Juárez, entre otras personalidades. Junto a ellos, se encontraban numerosos ex alumnos del Femenino pero también del Salvador de Madariaga, el antiguo Masculino, que no quisieron perderse el cumpleaños del primer edificio que alcanzó el ciclo de Secundaria en la ciudad, allí donde algunas mujeres comenzaron a estudiar tímidamente a finales del siglo XIX y artistas como Picasso se aprendieron los ríos de memoria.

Carlos Negreira, Xesús Vázquez y Diego Calvo presidieron el acto

En el mismo salón de actos donde hoy cuelgan unos medallones de Román Navarro –uno de los profesores del pintor–, el catedrático de la Universidad de Santiago, Guillermo Rojo, leyó la lección magistral. El investigador repasó en alto la trayectoria del centro. Desde cuando comenzó siendo un embrión en la calle de Herrerías de la Ciudad Vieja en 1862 hasta que se convirtió en un referente de la enseñanza. Y es que el primer proyecto de instituto tomó como solar el palacio de los marqueses de Camarasa, en el que se ubica actualmente el CEIP Hermanos Touzet. Cuentan los libros de historia que el vial llegó a llamarse en su día “calle instituto”. Sin embargo, las incomodidades y deficiencias del bloque dificultaban la labor de enseñar a los profesores.

Esta circunstancia llegó a oídos de Eusebio da Guarda que facilitó su traslado al camaranchón de la plaza de Pontevedra en 1889. El instituto comenzó así a formar a cientos de coruñeses y fue tras la Guerra Civil, en 1941, cuando se dividió en femenino y masculino, dando lugar al nacimiento del instituto de ciudad escolar, el actual Salvador de Madariaga, que fue inaugurado en 1947. Una vez consolidados en sus parcelas, ambos tuvieron familia numerosa. Así fue como nacieron los institutos de Zalaeta, Monelos, El Agra, A Sardiñeira, Monte das Moas, entre otros. Primero en calidad de filiales y más tarde, con plena autonomía.

El acto servía ayer para destacar el papel que desempeñó el Eusebio en la evolución y el desarrollo de la ciudad. Por eso, al perímetro del instituto se le conoce hoy como “ciudad educadora”.

Entrañable celebración del 150 aniversario del Eusebio da Guarda

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