redacción>a Coruña
El delegado del Gobierno, Miguel Cortizo, descartó ayer desalojar, por el momento, a los acampados del movimiento 15-M que todavía resisten en el Obelisco. Asegura que la Delegación está haciendo un seguimiento sobre este tema como supongo que hace el Ayuntamiento, pero al no haber perturbación del orden público, Cortizo no se plantea expulsar a los indignados. Se actuará con prudencia y con sabiduría por ambas partes, recalcó el representante en Galicia de la administración central.
Por su parte, el líder de Unión Coruñesa, Carlos Marcos, cree que la presencia del movimiento 15-M en los Cantones daña la imagen de la ciudad, junto con la desfeita de O Parrote o el poblado del Puente Pasaje. Por eso le reclama al gobierno local que sustituya la acampada del Obelisco por un punto de información en el que los indignados administren para facilitar la información que consideren oportuna.