El acusado de un apuñalamiento niega los hechos pese a la sangre de la víctima que había en su ropa

El acusado de un apuñalamiento niega los hechos pese a la sangre de la víctima que había en su ropa
el acusado asegura que se manchó al recoger del suelo su cajetilla de tabaco quintana

Cuando, la madrugada del 3 de diciembre de 2011, un hombre se presentó en el cuartel de la Guardia Civil de Culleredo para denunciar que había sido agredido aquella noche en un pub de O Burgo, los agentes lo detuvieron, a la vista de la sangre de que manchaba su sudadera y de las informaciones que le apuntaban como agresor y no víctima.

Ayer, el hombre –hoy acusado– volvió a defender su inocencia ante el tribunal de la Audiencia Provincial que le juzga por un delito de intento de homicidio que puede costarle nueve años de cárcel, y justificó aquellas manchas de su chaqueta con la mucha sangre que había en el suelo del local donde había pasado la noche cuando se agachó para recoger su cajetilla de tabacopara guardarla en el bolsillo.

La sangre, según se confirmó, pertenecía a la víctima de un acuchillamiento registrado aquella misma noche y la versión del sospechoso no convenció a los policías y guardias civiles que ayer declararon como testigos, que descartan que las marcas en las prendas del sospechoso pudieran corresponderse con las que deja un objeto empapado.

Su relato de los hechos choca además con el que ofreció ayer de los guardias civiles que le tomaron declaración aquella noche, que aludió a una llamada anónima recibida unas horas antes a su detención, en la que se le señalaba como autor de un apuñalamiento. “Lo conocíamos porque tiene varios antecedentes y es problemático”, declaró el agente, una afirmación que confirma su hoja de antecedentes, que incluye una sentencia de 1996 por homicidio consumado.

 

sin enfrentamiento previo

Según este testigo, cuando el hombre se presentó en el cuartel ya se le estaba buscando por el suceso ocurrido horas antes en el interior del pub donde se encontraban el acusado y la víctima.

Nadie los vio discutir ni enfrentarse entre ellos, pero lo cierto es que el perjudicado, de origen marroquí, fue hallado, sin conocimiento, en la entrada del establecimiento, con una cuchillada en el muslo que le afectó a la vena femoral y a punto estuvo de costarle la vida. Una lesión ocasionada con un arma similar a la que el encausado había mostrado momentos antes a otro cliente que se había negado a darle la mano, tal como refiere el fiscal en su escrito de acusación.

“Estaba como si no hubiese pasado nada”, recordó ayer el propietario del local, que señala que el acusado no salió del pub mientras se atendía al herido en el exterior, actitud que levantó las sospechas de varios de los presentes, según atestiguó un miembro de la Policía Judicial de Cambre.

Los investigadores reconocen que el arma nunca se recuperó, y ese es uno de los argumentos que usará la defensa para pedir la libre absolución. De forma subsidiaria, intentará que la condena sea por delito de lesiones, con una pena muy inferior.

El acusado de un apuñalamiento niega los hechos pese a la sangre de la víctima que había en su ropa

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