El 15-M deriva en asambleas populares de barrio a las que acuden dos personas

  Nadie recordó su primer cumpleaños y su espíritu parece languidecer en los umbrales de una llamada a la protesta social. El movimiento 15-M se diluye en su transformación en corriente asamblearia popular de barrio.

Una prueba de ello es el acta de la reunión convocada para el pasado viernes en Os Mallos, en la que se recoge que a la cita en Ramón Cabanillas acudieron dos personas: Carlos Alberto e Irene, quienes manifiestan en el acta sus dificultades para canalizar las reuniones.

Además, del resumen se desprende ciertos problemas con personas que acuden con la intención de cruzar insultos y provocaciones a “Personas trabajadoras que habían reclamado la participación en la REDE”.

El movimiento trabaja en la organización de piquetes que pretenden actuar durante la huelga general

 

A pesar de que tras una discusión surgida a raíz de las movilizaciones de Alcoa la asamblea ha decidido primar la libertad individual para asociarse o adscribirse a cualquier partido, sindicato u organización, el movimiento 15-M trabaja en la organización de una serie de piquetes informativos que pretenden desarrollar su tarea durante la huelga general del próximo jueves.

Al parecer, se han concretado una serie de puntos a los que acudir durante la mañana. A mediodía los participantes acudirán –cada uno con su bocadillo– a una “quedada para comer” en el Obelisco, en la que se decidirá adónde ir por la tarde. El movimiento se ha citado para nuevas reuniones previas, de las que aún se desconoce el lugar.