Dolce Vita sufre el cierre de los buques insignia que aún permanecían abiertos

Si los comerciantes apenas consiguen que los coruñeses se rasquen el bolsillo, para menos impulsos al consumo está el Centro Comercial Dolce Vita que en las próximas semanas sufrirá el cierre de la mayoría de las tiendas que todavía atraían al público a las instalaciones. Al ya anunciado adiós de Primark a mediados de septiembre, se han sumado otros cuatro cierres inminentes. Además, sin hacer ruido se han ido clausurando al menos otros cuatro negocios.
Numeroso público recorre estos días los pasillos de Dolce Vita ávido de gangas, pero no las aparejadas a las rebajas sino aquellas que ofrecen los comercios en pleno proceso de liquidación por cese de la actividad en la gran superficie. La cadena Primark –que ya había anunciado su marcha para octubre– finalmente bajará la persiana el 14 de septiembre, tras una última jornada de ventas.
Los precios también han caído en picado en C&A que, tras meses de rumores sobre el cierre, ha decidido abandonar el centro ahora que se marcha uno de los principales polos de atracción. En sus cristaleras ya cuelgan carteles indicando que “a partir del 14 de agosto” se atenderá en las tiendas de los centros comerciales de Cuatro Caminos y Marineda City, pues también se marcharon de Espacio Coruña el verano pasado.
De igual forma el día 5 dejará de funcionar el comercio de H&M, que ha colocado numerosas ofertas sobre la ropa para reducir el stock lo máximo posible antes del abandono definitivo. En la misma situación se encuentran Punto Roma y Luxurissime.
Sin embargo, en este último caso todavía no se conoce la fecha de cierre y de momento los empleados se limitan a intentar vender ropa y complementos, además del propio mobiliario del local. De hecho, ya se han reservado varias piezas. En el caso de la firma de electrodomésticos y tecnología Media Markt, aunque no existe una confirmación, numerosos rumores apuntan a una mudanza de centro.
Todas estas firmas no son las únicas que dirán adiós a la gran superficie en un corto período de tiempo pues al menos un local de hostelería y los establecimientos Amichi y Benetton –que culminó la liquidación el 31 de julio– han clausurado los negocios sin apenas hacer ruido.
También es ese el caso de La Casa del Libro y podría serlo de Décimas, que lleva meses funcionando como outlet.