Detienen a una madre y a sus dos hijos que vendían droga en un piso de la ronda de Nelle

Investigadores de la Policía Nacional detuvieron el jueves pasado a una madre y a sus dos hijos por traficar con cocaína y heroína en su piso de la ronda de Nelle. Esta familia era, según la Jefatura Superior, un verdadero clan dedicado a la distribución de drogas en la ciudad, aunque no se encontraron grandes cantidades de estupefacientes en el domicilio. Los tres detenidos pasaron a disposición judicial.
El primer aviso de lo que estaba ocurriendo lo recibió la Policía Nacional gracias a una denuncia anónima al correo de antidroga@policia.es. En el mensaje se mencionaba la continua afluencia al piso de personas que se describían como toxicómanos y que subían y bajaban del domicilio “a cualquier hora del día y de la noche”. Los agentes de la brigada de Tráfico Medio acudieron a comprobar el chivatazo y, en efecto, se encontraron con que la escena era como se la habían descrito.
Tras reunir suficientes evidencias, cuando la investigación se encontraba desde hacía tiempo bajo a tutela de la autoridad judicial, se procedió a la entrada en el domicilio indicado en la quelos policías sorprendieron in fraganti a los sospechosos. Según la Jefatura, estaban manipulando la heroína y la cocaína. Además, también se encontraban en el piso varios “clientes”, que consumían la droga allí mismo. En el domicilio se localizó algo de narcóticos preparados en dosis para su venta, y cocaína y heroína todavía pendiente de preparar para su distribución, así como dinero en efectivo.
 
segundo golpe en un mes
Se trata del segundo golpe en lo que va de año contra el narcotráfico a pequeña escala en  A Coruña. El anterior tuvo lugar  a mediados de enero en la calle de Capitán Juan Varela, en Os Mallos, no lejos de allí. En aquella ocasión, los agentes de la Policía Nacional entraron en una frutería situada a doscientos metros escasos de la Audiencia Provincial y detuvieron al dependiente por traficar con cocaína y marihuana.
Según las investigaciones policiales, formaba parte de una clan brasileño que se dedicaba a distribuir cocaína y marihuana. Otras cuatro personas  más fueron detenidas como parte de lo que la Jefatura Superior  de Policía dio en llamar “Operación Comeanda”, en el que se llegó a incautar medio kilo de marihuana al clan brasileño que regentaba el local.
Guardaban allí la droga que después distribuían entre sus clientes pero, como descubrieron los  investigadores de la Policía Judicial, a venta no se hacía en la calle, sino que tenían unos clientes  muy concretos: las casas de citas distribuidas en pisos por toda la ciudad.