Detienen a un vecino de Orillamar que dirigía una red de tráfico de speed

La operación que llevó a cabo el Cuerpo Nacional de Policía (CNP) la semana pasada y que culminó con la desarticulación de una red de tráfico de drogas de tamaño medio que operaba en Galicia, Asturias y Cantabria, se cerró el pasado jueves con la detención del que las autoridades consideran como el cabecilla, en un apartamento situado en la zona de Orillamar. La operación pertenecía a la Jefatura Superior de Gijón, que se interesó por la captura de este individuo, un asturiano de 33 años que llevaba tiempo afincado en A Coruña, pero fueron agentes destinados en A Coruña los que llevaron a cabo el arresto.
Era desde Orillamar donde daba órdenes a su banda, compuesta por una docena de personas. La Policía destaca su talante autoritario y la “disciplina férrea” que mantenía sobre sus hombres. Tampoco dudaba en ordenar palizas contra los traficantes rivales de menor nivel que no querían trabajar con ellos o que se retrasaban en los pagos. El sujeto había sido detenido ya en 2010, también por tráfico de drogas, durante otra operación en la que se llegaron a incautar 232 kilogramos de cocaína. En esta ocasión durante el arresto no se le intervino ninguna cantidad de estupefacientes, aunque sí se efectuaron registros en un yate que estaba atracado en un puerto deportivo. Tras asegurarse de que tampoco había drogas ocultas en su interior, la embarcación fue intervenida por las autoridades que, de todos modos, ya se había hecho con casi seis kilos de cocaína y 23 kilos de hachís en otras intervenciones realizadas en Asturias y Santander.

más de 13 kilos
El hachís lo obtenían en Galicia y a través de sus conexiones en otras poblaciones del sur de la península pero la banda destacaba sobre todo por fabricar y distribuir drogas sintéticas. Se incautaron 13,7 kilos de speed, lo que supone en mayor decomiso de drogas sintéticas en el norte de la península en lo que va de año.
De hecho, la Policía de Gijón comenzó las investigaciones, hace nueve meses, cuando se detectó un aumento en el consumo no solo de speed sino también de otros derivados de la metanfetamina. La paciente investigación llevada a cabo por los agentes de la Policía Judical se prolongó durante todo este tiempo, a medida que seguían añadiendo nombres a la red. hasta la semana pasada, cuando por fín pudieron descubrir en Gijón una venta de drogas en la que participaron algunos de los cabecillas de la trama, entre los que se encuentra un hostelero en cuyos locales se distribuía la droga.
Las detenciones comenzaron la semana pasada, cuando cayeron uno a uno todos los implicados que habían estado bajo el punto de mira de la policía, siendo su líder uno de los últimos. En total se llevaron a cabo siete registros en Asturias, concretamente en las localidades de Avilés, Siero y Gijón. En esta última ciudad fue localizado y desmantelado el laboratorio clandestino en el que se cocinaba y adulteraba el clorhidrato de cocaína.