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jueves | 25 abril | 2024
La Policía Local detuvo a un senegalés de 39 años por intento de homicidio a las ocho y media de la mañana de ayer. La víctima es el dueño del local Inox, en Orillamar, al que golpeó en la cabeza con una botella cuando éste le sorprendió robando, dejándole malherido. Los agentes municipales le dieron alcance en el cruce de la calle Hospital con Sol, con sangre en la ropa y le incautaron varias armas, así como los 776 euros que era la recaudación del local de aquella noche.
Los agentes habían acudido en respuesta a una llamada alertando de que un individuo que sangraba por la cabeza pedía socorro a gritos en Orillamar. Al llegar, este les contó que había entrado en su local, que estaba cerrado al público, cuando descubrió la puerta cerrada y un cristal roto. Entonces, alguien salió de detrás de la barra y le golpeó en la cabeza con una botella. Trató de protegerse con los brazos, pero su agresor le agarró por uno de ellos y le atacó de nuevo.
Por suerte, pudo zafarse de él y huyó a través de la puerta de emergencia. El sospechoso le persiguió empuñando un cuchillo y haciendo ademán de clavárselo, pero pudo salir al exterior. “Si no es por la puerta de emergencia y el hueco antipánico, me mata”, aseguró a los agentes que le atendieron.
Mientras tanto, el sospechoso se daba a la fuga pero no llegó muy lejos. Cuando la Policía lo capturó, llevaba encima dos cuchillos, un destornillador y una tubería de plomo.
