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jueves | 25 abril | 2024
La colaboración ciudadana sigue dando réditos a la Policía Nacional en su lucha contra la plaga de los robos nocturnos en locales comerciales durante la noche. Ayer, la Jefatura Superior anunció que había detenido a un carballés de 43 años, al que sorprendió huyendo tras supuestamente cometer un robo en una tienda del barrio de Os Mallos el viernes de la semana pasada. El sujeto resultó ser un ladrón habitual con varias detenciones en su haber.
La intervención policial fue posible solo después de recibir una llamada de un testigo del allanamiento. Eran las dos de la madrugada, y varios coches patrulla fueron enviados por la sala del 091 a esa calle. Dado que a esa hora apenas hay tráfico, el primer coche patrulla pudo llegar en escasos minutos, a tiempo de distinguir a un varón vestido con ropas oscuras alejándose del lugar a paso vivo.
Era evidente que habían robado en la tienda porque el cristal del escaparate estaba fracturado y el interior revuelto, así que los agentes interceptaron al sospechoso y le registraron: llevaba unos guantes y una mochila, y en su interior tenía “varios productos de los que se venden habitualmente en locales como el que acababan de robar”, según se limitan a señalar desde la Jefatura Superior, que no ha querido concretar qué clase de tienda había sido asaltada. Antes de detenerlo, localizaron al propietario y este confirmó que los efectos eran suyos.
La táctica policial
Esta intervención policial es un ejemplo de la táctica que han adoptado los mandos policiales desde el año pasado, cuando una oleada de robos en comercios alarmó a toda la ciudad. Y consiste, simplemente, en tratar de responder lo más rápidamente posible a cualquier llamada al 091 de un testigo de estos robos. Así ocurrió en la madrugada del seis de septiembre en Rafael Alberti, en la segunda fase de Elviña. Allí, “unos jóvenes estaban merodeando alrededor de un vehículo estacionado en vía pública en actitud sospechosa”.
Los policías enviados al lugar interrogaron a los jóvenes, de 18, 19 y 20 años, e inspeccionaron su coche, en el que encontraron numerosos objetos. Entre ellos, varias tarjetas bancarias y varias camisetas con el logo de un establecimiento comercial próximo al lugar, que resultó que acababan de asaltar y cuya caja fuerte habían tratado de abrir.
