Derecho a aprender, orgullo de enseñar

Derecho a aprender, orgullo de enseñar
el director de arquitectura y la decana de educaciã³n se sumaron a la iniciativa susy suã¡rez

No era difícil verlos. Se organizaron en grupos de varias decenas y ocuparon plazas y parques coruñeses durante buena parte del día de ayer. Todo con el único objetivo de convertir la ciudad en una gran aula universitaria. La intención: hacer visibile la “crítica” situación que atraviesa la educación superior y concienciar a la ciudadanía de los efectos “perversos” que tendrían las reformas que quiere aplicar el Ministerio de Educación.

La iniciativa “#Aulasnarua”, organizada por el colectivo UDC en Loita, consiguió reunir a cientos de jóvenes en las clases que se impartieron al aire libre. Para ello, contaron con el respaldo de más de una treintena de docentes, que se sumaron a la propuesta estudiantil en defensa de la universidad pública. Recortes, nombramientos académicos por cargos de empresas, supresión de becas, instauración de nuevos criterios de excelencia vinculados a los presupuestos, elitización de la educación... Estas y otras críticas fueron las que ayer sacaron a la calle profesores y estudiantes. Todos rechazan las consecuencias que acarrearía la instauración de la Lomce y las reformas educativas para el sector académico.

 

clases

Por todo, la comunidad universitaria decidió cambiar las aulas de las facultades por palestras en la vía pública, donde no solo los alumnos sino todos los ciudadanos pudieron tomar parte.

Una treintena de profesores, entre ellos decanos, participaron en la iniciativa para defender la educación pública

El Obelisco, ocupado desde las 11.00 hasta las 13.30 horas, fue el escenario elegido por los profesores de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura. Su director, Fernando Agrasar, fue el encargado de inaugurar las charlas en este escenario, con una disertación sobre la moral y la arquitectura.

No pasó inadvertida su intervención. Un grupo de jóvenes sentados en el suelo captaba la atención de los transeúntes. Pero no menos que el mimo del que el profesor se acompañó para impartir su clase. El dinamismo, el interés del tema y lo llamativo de la charla hicieron de la clase de Agrasar una de las más seguidas por los estudiantes. Tampoco tuvo poco público la decana de la facultad de Ciencias de la Educación. A las 11.30 horas, Ana Iglesias comenzaba su clase en las escaleras del mercado de San Agustín.

 Durante una hora, decenas de jóvenes prestaron gran atención a las palabras de la directora del centro, quien habló sobre “Género, igualdad y educación”.

En total fueron más de treinta intervenciones, que congregaron hasta última hora de la tarde a universitarios y curiosos. La crisis, las políticas de vivienda, el urbanismo, las migraciones, la movilidad sostenible... fueron algunos de los temas de las aulas abiertas, que también se celebraron en Méndez Núñez, la plaza de España, la plaza de Pontevedra y María Pita.

Derecho a aprender, orgullo de enseñar

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