Decenas de propietarios buscan ingresos extra con el alquiler de sus casas en webs de vacaciones

Cada vez más turistas “viven” en A Coruña durante sus estancias vacacionales en la ciudad. La posibilidad de sentirse como en casa se la dan decenas de coruñeses que se han apuntado al alquiler de sus viviendas, al completo o por habitaciones, a través de portales especializados como Airbnb o Homelidays. Las motivaciones de los coruñeses son múltiples pero, en general, la búsqueda de unos ingresos extra es lo que impulsa este creciente mercado. Aunque los hoteleros aseguran que no les afecta de forma directa, sí demandan que se regule el formato para que los propietarios paguen las tasas correspondientes.
Los recortes en los sueldos, el desempleo o el simple hecho de que las propiedades inmobiliarias aún no han alcanzado el valor que uno pretende para vender, entre otras cuestiones, pueden haber multiplicado el mercado de los apartamentos de alquiler vacacional que tanto triunfa en otras ciudades y países europeos como, por ejemplo, Portugal. Cuando la página web Airbnb arrancó en España poco antes del verano de 2012 apenas una docena de coruñeses alquilaban dormitorios en sus casas a los viajeros y ahora dueños con todo tipo de perfiles ofrecen un alojamiento casero y sin horarios a los visitantes. 
Esta página cuenta ya con una bolsa de 80 pisos completos, a los que habría que sumar las opciones que se abren al elegir algún municipio del área. Más de 300 coruñeses intentan conseguir un sobresueldo recibiendo a inquilinos por días sueltos o en cortos períodos vacacionales. Además, otros 143 usuarios proponen la convivencia al alquilar solo alguna habitación. 
En el caso del portal Homelidays, el área metropolitana en su conjunto dispone de 122 inmuebles arrendables de los 831 que se encuentran en la provincia. 

desde 29 euros el día
La tendencia se hace fuerte por las metas económicas de los dueños pero sobre todo por el interés de los turistas, que esperan encontrarse precios más asequibles y posibilidades de un ahorro a mayores cocinando o tomando unas copas en casa. 
Los costes se adaptan a todos los bolsillos pues trasladarse un día a A Coruña puede salir entre 29 y 50 euros. Esa es la franja en la que se mueven la mayoría de las tarifas pero como también hay lujosos apartamentos en la calle Real o en la Ciudad Vieja y chalés en las afueras, los precios  varían un poco. 
La mayoría de los arrendatarios promocionan, como principal ventaja, las vistas a Riazor o al Orzán o la cercanía con esas  y otras playas. Hay áticos próximos a los arenales que cuestan más de 100 euros la jornada.

mayor regulación
A pesar de esta nueva fórmula para pernoctar, el presidente de la Asociación de Hospedaje de A Coruña (Hospeco), Rafael Benito, asegura que de momento no han “notado una bajada de clientes por este motivo”. “Es muy difícil controlar quién podría haberte comprado una habitación de hotel y se va a un apartamento”, razona. 
El sector sí considera que esta “moda debe regularse”. “Más allá de que se regule con los impuestos pertinentes, desde los hoteles lo que se demanda es que tengan las mismas obligaciones en cuanto a mínimos de equipamiento, calidad del servicio...”, subraya Benito.  
Así lo creen porque “indudablemente es una competencia real y no sería competencia desleal mientras estuviese regulado”.  “Se trata de una nueva oferta ante una demanda creciente pero tiene que cumplir con ciertos requisitos y parámetros de calidad y control como ocurre con los hoteles”, zanja el representante del colectivo.