9º-15º
jueves | 25 abril | 2024
Ajeno a la polémica provocada por unas declaraciones de la conselleira de Sanidade sobre la posibilidad de cerrar alguna unidad de trasplantes en la ciudad, el coordinador de este área en el Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac), Antón Fernández, presentó ayer en Alicante una ponencia sobre un protocolo pionero implantado el año pasado.
Ha mostrado a otros coordinadores nacionales los potenciales en este área del Chuac como un protocolo para operar a testigos de Jehová. ¿Qué es lo que les ha explicado?
Nuestro protocolo de trasplante renal a personas de la confesión religiosa testigos de Jehová entre donantes vivos, que se implantó el año pasado. Hay un compromiso mutuo: nosotros nos comprometemos a practicar el trasplante sin utilizar sangre ni derivados por sus consideraciones a este respecto y ellos se comprometen a respetar las decisiones profesionales si está en riesgo su vida o su salud.
¿Se han realizado muchas operaciones de este tipo?
Desde el año pasado dos; una en 2012 y otra este año. Los donantes han sido los maridos de dos mujeres. De momento no hay más demanda, tan solo una persona que espera trasplante de un fallecido porque aquí solo se dan las donaciones entre vivos en un entorno familiar o de pareja.
¿Este protocolo es pionero a nivel estatal?
Sí lo es porque no hay ninguna otra comunidad que tenga protocolizado todo este proceso de trasplante.
Sin embargo, ¿será complicado cumplir el compromiso?
Más o menos en el 25% de los trasplantes renales hace falta una transfusión en algún momento porque los pacientes con insuficiencia renal suelen tener anemia y la operación no deja de ser una cirugía mayor. Pero tenemos todavía más cuidado de minimizar el riesgo de que sea necesaria la transfusión.
Con esta carta de presentación el Chuac se muestra como un hospital puntero...
Somos el hospital de España que hace más trasplantes entre vivos con gente incompatible a la que sometemos a un proceso de sensibilización para que sean compatibles. Sin duda alguna A Coruña es el tercero a nivel nacional en cuanto a la práctica de trasplantes renales entre vivos y el cuarto en el histórico: llevamos 2.600 trasplantes renales, con lo que cumplimos sobradamente esos criterios de actividad mínima que se marcan.
¿Cree que con estos datos sería ilógico que se plantease cerrar una unidad de trasplante en A Coruña?
No voy a entrar en el tipo de organización sanitaria pero lo único que digo es que todos los programas superan los mínimos establecidos y lo han hecho a lo largo de todos los años. Somos referencia en programas como el de los testigos de Jehová y no es necesario decir nada más.
¿Las cifras siguen creciendo?
Sí, el ritmo ha ido 7, 12, 19, 24 y este año terminaremos en los 30 o cerca en cuanto a trasplantes renales entre vivos. Casi un 25% son donantes vivos y eso está a niveles de los países más desarrollados de Europa.
¿Habrá nuevos programas?
Ya los tenemos casi todos y la cobertura y calidad son excelentes. Estamos muy satisfechos de que una ciudad de 250.000 habitantes compita al mismo nivel que Madrid y Barcelona.
