Crece el aparcamiento irregular en zona amarilla para no pagar la ORA

Pronto hará casi un año desde que el servicio de Ordenación y Regulación de Aparcamiento (ORA) pasó a ser gestionado por Setex Aparki, después de que el Ayuntamiento rechazara remunicipalizar la actividad. Desde entonces, se ha reducido mucho el número de multas impagadas, según fuentes municipales, y los tickets que se encuentran en los parabrisas ya no son papel mojado. Sin embargo, los propios policías de Disciplina Vial señalan que la mayor presión en la zona azul provoca que cada vez más coches aparquen en las zonas de cara y descarga de manera irregular.
“Juegan con las posibilidades, y saben que hay más empleados de Setex Aparki comprobando que se haya pagado la ORA que policías vigilando las zonas de carga y descarga”, explican los propios agentes. Para un conductor avispado y decidido a no abonar aparcamiento, le puede salir a cuenta aparcar sobre las rayas amarillas y vigilar de vez en cuando la aparición de la Policía Local, que presagia la llegada de la grúa municipal.

transportistas
“La gente si puede no pagar, no paga. En la Casa del Mar tienen un parking a 90 céntimos pero aparcan en zona amarilla”, se lamenta José Manuel Reimúndez, presidente de la Asociación de Transportes Ligeros, que ya denunció el problema ante la Concejalía de Movilidad. Porque son los transportistas los que sufren las consecuencias.
Pero Reimúndez reconoce que no es solo un problema que afecte a los turismos. “La gente tampoco tiene dónde aparcar, y si tienen una furgoneta, prefieren llevarla a la ciudad para poder estacionar en zona de carga y descarga todo el día”. Estos problemas se dan a diario sin que se haga nada para ponerle remedio.
La obsesión por aparcar fuera de la zona azul es tal que también se aprovecha el espacio reservado por señales de tráfico para obras o mudanzas. “Tú pagas dinero para reservar ese trozo de acera, a veces cientos de euros, y la gente va y aparca ahí”, denuncia Reimúndez.
En todo caso, el hecho de que ahora la gente se tome más en serio la ORA, no significa que la zona azul cumpla su propósito de favorecer la renovación de plazas de aparcamiento, imponiendo un tiempo limite de estacionamiento. La idea es que una vez agotado, el conductor tendrá que desplazarse a otra zona de la ciudad para poder aparcar, porque no se le permitiría renovarlo en esa zona. Pero esa medida todavía no se ha puesto en marcha, y en cambio, la introducción de otras, como una aplicación que permite pagar a través del teléfono móvil sin tener que bajar hasta el parquímetro, parecen fomentar que los vehículos sigan estacionados durante horas.