A Coruña ya se guía por las directrices del Plan General ideado por Busquets

Después de casi seis años de trámites, el nuevo Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) ya está en vigor. El documento, que fue publicado el 9 de julio con el Boletín Oficial de la Provincia, marca, desde el pasado fin de semana, las directrices urbanísticas que regirán en la ciudad los próximos 12 años.
El PGOM fue diseñado por el urbanista catalán Joan Busquets, que basó su idea de A Coruña en dos premisas: la rehabilitación y los espacios libres. Fue el anterior gobierno local el encargado de iniciar la tramitación del documento, que pasó por primera vez por el pleno en diciembre de 2009.
Esa primera versión fue modificada posteriormente por el PP, tras su llegada a la alcaldía en junio de 2011. Entre las novedades que introdujeron se encontraba un elemento polémico: el famoso fuera de ordenación, una figura que los conservadores trataron de eliminar en el nuevo texto tras una importante campaña en contra de este elemento durante su etapa en la oposición.
Otro de los cambios significativos fue la decisión de trasladar la edificabilidad del Agra de San Amaro –donde se preveía la construcción de cinco torres– a la cantera de Adormideras, que no contó con la aprobación de los vecinos de la zona. La urbanización de la cantera forma parte del plan especial de la Torre de Hércules, que según el gobierno local, es del agrado de la Unesco y la dirección xeral de Patrimonio.
El documento pasó dos veces más por el pleno, en agosto y diciembre de 2012, y recibió el visto bueno definitivo de la Xunta en febrero de este año. El conselleiro de Infraestruturas, Agustín Hernández, aprobó el PGOM coruñés con la condición de que el Ayuntamiento introdujese nuevos cambios en el documento. Este hecho desató las críticas de la oposición, que entendían que esas modificaciones obligaban a llevar de nuevo el Plan General al pleno, al tratarse de variaciones de calado.
En el BNG decidieron recurrir a la vía judicial. Interpusieron un recurso contra el documento en el contencioso administrativo, al apreciar “ilegalidades” en su tramitación y en el propio contenido. Lo hicieron después de la publicación del volumen en el BOP, ya que, aseguran, esta última versión incluye “cambios que non foron esixidos pola Xunta na súa orde do 25 de febrerio”.
Como ejemplos, el BNG apunta a la ampliación del permiso de obras de reconstrucción a todo tipo de inmuebles, y no solo a aquellos que están catalogados, tal y como aparecía reflejado en la penúltima versión del PGOM. En el grupo municipal nacionalista aseguran que, por el momento, el recurso sigue adelante, e insisten en que el documento debería necesitaba de una “resolución municipal”, antes de su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia.
Por su parte, el PSOE considera que los cambios introducidos por el PP en el Plan General son “pocos, pero muy importantes”, lo que hacen que el documento que entró en vigor el pasado sábado 27 sea “un plan del ladrillazo, en el que se dan privilegios a unos pocos frente a la mayoría de los coruñeses”. Los socialistas consideran que los populares “mintieron” cuando prometieron que se abriría un nuevo período de exposición pública del documento, y que el texto se aprobó sin que se aclarase a los vecinos el fuera de ordenación.
Por su parte, en el Ayuntamiento se muestran satisfechos con la tramitación del plan, que, aseguran, se logró aprobar en un tiempo récord. n