La contaminación acústica y la escasez de frecuencias de los buses preocupan a los vecinos

La contaminación acústica y la escasez de frecuencias en determinadas líneas del bus urbano son dos de las principales preocupaciones de los coruñeses.
Las juntas directivas de las asociaciones vecinales de O Castrillón, Oza-Gaiteira-Os Castros y de la Ciudad Vieja han hecho llegar al equipo de gobierno, que preside Carlos Negreira, una serie de demandas, a través del registro municipal.
Así la entidad de O Castrillón se encuentra principalmente preocupada por los ruidos. Pide por este motivo que se incorpore en la ordenanza municipal la posible contaminación acústica a locales no colindantes, así como tener en cuenta los niveles de ruido y vibraciones que se generan como consecuencia de otras actividades de tipo industrial, comercial o de servicios.
Propone la entidad un reparto de períodos horarios que dividen la jornada en diurno: de 08.00 a 20.00 horas; vespertino: de 20.00 a 23.00 horas, y nocturno: de 23.00 a 08.00 horas.
También apuesta por que las actuaciones musicales en la calle solo precisen de licencia cuando su horario de realización se corresponda con el horario nocturno o con un tiempo de actuación que supere las tres horas.
La entidad de O Castrillón considera, asimismo, que la práctica de juegos y deportes en espacios públicos, tales como pistas deportivas en zonas de uso residencial y plazas, entre otros, en horario nocturno esté prohibida.
Oza-Gaiteira-Os Castros aboga porque se mejore el transporte público en el marco de un plano de movilidad tendente a un bus con líneas más frecuentes, que incidirían en el recorte de tiempos entre paradas. Y pone como ejemplo las líneas 2, 2A, 12 y 17 que, según la entidad, ahora tienen tiempos superiores a los 20 minutos. n