Por mostrarle los genitales a un menor a través de las mamparas que separan los urinarios de la estación de trenes, perseguir al chico con los pantalones bajados y llegar a hacerle gestos obscenos, la jueza de penal 5 acaba de imponer a un cuadragenario seis meses de cárcel por delito de exhibicionismo.
Los hechos objeto de juicio tuvieron lugar el pasado mes de diciembre, cuando el menor, de 14 años, se encontraba en uno de los baños individuales de la estación de San Cristóbal. según se entiende probado, el acusado se dirigió al compartimento contiguo, apoyó sus genitales contra la mampara traslúcida y comenzó a masturbarse. Señala la sentencia que, al hacerlo, el acusado era plenamente consciente de que su víctima era un menor.
Pero no quedó ahí la cosa. Tal como relató el joven a los policías que vigilan la estación aquella misma tarde, cuando escapó de los baños, el hombre salió tras él mostrando los genitales.
El chaval salió de la estación y se sentó a descansar en una parada de bus cercana. A su lado se sentó un hombre, y el adolescente le pidió un cigarro sin pararse a ver que se trataba del mismo individuo, que lo había perseguido hasta allí. Como respuesta, el adulto le hizo un gesto, como invitándolo a volver a los baños, lo que llevó al menor a pedir ayuda a los agentes.
Por el trastorno causado, el fallo impone al exhibicionista, además de la cárcel el pago de una indemnización de mil euros.