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jueves | 25 abril | 2024
Los últimos meses han sido bastante lluviosos, lo que ha forzado a los coruñeses a permanecer en sus casas más de lo que hubieran querido. A consecuencia de ello, las zonas verdes han permanecido vacías, pero el Ayuntamiento anunció recientemente sus planes para añadir zonas cubiertas en algunos de los principales parques de la ciudad, de manera que el público pueda hacer uso de ellas incluso con mal tiempo.
El concejal de Regeneración Urbana, Xiao Varela, destacó al respecto que “é unhas das lineas que temos en conta, e están contidas no orzamento”.
Sin embargo, teniendo en cuenta que hace poco que se aprobaron las cuentas municipales de este 2016, y que quedan muchas tareas pendientes antes de que finalice el año, el concejal del área señala que no cree que sea posible hacerlo hasta el año que viene: “Será entonces cando empecemos a intervenir, seguramente”.
Aunque se ignora todavía en cuántas zonas verdes tiene previsto actuar el Gobierno local en 2017, Varela adelantó que entre las que se barajan se encuentra el Campo de Marte, una de los escasos parques con los que cuenta el barrio de Monte Alto. Se satisfaría así una demanda de los usuarios.
“É unha magoa que non se faga algo así en Galicia, onde chove. Sería moi fácil poñer unha uralita ou algo así”, señaló una mujer, que apuntó que, como madre, le gusta poder salir con sus hijos al aire libre siempre que es posible, pero que depende de las condiciones meteorológicas.
con juegos infantiles
Los padres también esperan que en estas zonas cubiertas se instalen juegos infantiles para mantener entretenidos a los niños, lo que podría implicar techar las zonas actuales o relocalizarlas para situarlas debajo de la estructura, Sin embargo, la Concejalía de Regeneración Urbana no ha avanzado sus planes en ese sentido.
El Ayuntamiento también está trabajando para satisfacer otras reclamaciones de los usuarios de los parques, muchos de ellos referentes a los perros, cuya habitual presencia se traduce también en excrementos en el césped. Los padres critican que no pueden dejar a los niños jugar en la hierba en muchas ocasiones por miedo a que se ensucien con las deposiciones.
