El cierre de O Burgo obliga a los mariscadores a iniciar la limpieza en los parques de siembra de la ría

El cierre de O Burgo obliga a los mariscadores a iniciar la limpieza en los parques de siembra de la ría
Los mariscadores actuaron junto al Materno quintana

Los mariscadores adelantaron a ayer el inicio de las tareas de limpieza de los parques de siembra de la ría empujados por el parón en su trabajo habitual debido al cierre de la zona por la presencia de elevados niveles de toxina. En la primera jornada tras el permiso concedido por la Consellería do Mar los 29 operarios que se desplazaron al parque de Abella retiraron dos contenedores enteros de mejillón considerado residuo.
La imposibilidad de salir a faenar por la clausura temporal de O Burgo hizo que los trabajadores acelerasen su proyecto de mejora y restauración de los parques de cultivo de marisco de la ría. El presidente del colectivo de a pie, Andrés Pena, explicó ayer que durante algo más de dos horas trabajaron en la retirada de mejillón de la zona conocida como Abella, en As Xubias. Aunque estas actuaciones –compartidas con la empresa pública Seaga, que ayer envió a un trabajador para supervisarlos– pueden realizarse a pesar del cierre, la subida de la marea los emplazó para hoy.
En el escaso tiempo que tuvieron para limpiar consiguieron eliminar “dos contenedores de mejillón”, lo que les permitirá ganar un buen sueldo al menos por un día pues el Ejecutivo gallego les abonará 3.000 euros por cada uno de ellos. Eso sí: habrá que repartir el total entre los 29 operarios que bajaron ayer.
Pena estima que hoy habrá más mariscadores para realizar estas tareas y, además, al haber retirado lo más visible no cree que sean capaces de completar tanta cantidad.
Una vez terminen en ese punto de la ría se trasladarán a otro parque de siembra próximo a A Ponte Pasaxe, que tiene una mayor extensión y conllevará más días de revisión del fango. De momento tan solo podrán entrar en estos dos lugares porque el parque conocido como de Gervasio está pendiente de una decisión judicial. “El señor que lo tenía en concesión recurrió la sentencia que le decía que se quedaba sin él”, aclara el representante del sector.
Pese a este problema de última hora, tendrán ocupación para todo el mes pues han solicitado diez días de retirada del mejillón y otros cinco de extracción, entre el 16 y el 20 inclusive, si las toxinas lo permiten.
La última analítica realizada por los técnicos volvió a arrojar un resultado muy alto en lipofílicas y se necesitan dos exámenes que dén negativo para que O Burgo se reabra a la actividad.

El cierre de O Burgo obliga a los mariscadores a iniciar la limpieza en los parques de siembra de la ría

Te puede interesar