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jueves | 25 abril | 2024
Cientos de personas, entre ellas decenas de policías con sus uniformes de gala, despidieron esta tarde en Burela al agente Rodrigo Maseda, que perdió la vida el pasado viernes en la ensenada del Orzán cuando intentaba rescatar del agua a un estudiante eslovaco, Tomas Velicky, que continúa desaparecido.
Hasta la capilla ardiente, que quedó instalada ayer por la tarde en la Casa da Cultura de Burela, se acercó el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, que antes del traslado de los restos mortales de Maseda hasta la iglesia parroquial de la localidad, le impuso la Medalla de Oro al Mérito Policial -la condecoración más alta que concede este Cuerpo- a título póstumo.
Al funeral también asistieron, entre otras autoridades, el delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez; el director general de la Policía, Ignacio Cosidó; y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, quien se acercó a los familiares del agente fallecido para transmitirles personalmente sus condolencias.
En declaraciones a los medios de comunicación, Feijóo calificó a los tres policías fallecidos en el Orzán como "tres héroes que están en la memoria colectiva del pueblo de Galicia".
"El pueblo gallego no olvidará que hay tres personas que dieron su vida en un acto de servicio. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y, en este caso, la Policía, acaba de acreditar que está compuesta por personas que están entrenadas para salvar, incluso poniendo en riesgo su propia vida", dijo el presidente de la Xunta.
Núñez Feijóo también quiso agradecer al Gobierno de España, al Ayuntamiento de A Coruña y a la propia Xunta de Galicia los medios que puso a disposición del dispositivo de búsqueda para recuperar los cuerpos de los tres funcionarios fallecidos.
El presidente gallego agradeció además al Ministerio del Interior la decisión de concederles a los policías fallecidos "la Medalla de Oro a título póstumo", para que sus "causahabientes puedan tener un recuerdo permanente de su hoja de servicios".
Por último, Núñez Feijóo también tuvo palabras de reconocimiento para los alcaldes de Burela y Friol, José María González Barcia y Antonio Muiña, por el "cariño" que demostraron desde el primer momento hacia las familias, así como para las muestras de solidaridad recibidas desde toda España.
Los agentes fallecidos "forman parte de la gran obra que hacen todos los días los policías nacionales y la guardia civil", concluyó.
Desde la capilla ardiente, la comitiva fúnebre se desplazó hasta la Iglesia Parroquial de Burela, que se quedó pequeña para acoger a los cientos de personas que quisieron darle el último adiós a Rodrigo Maseda, cuyos restos mortales recibieron sepultura en el cementerio municipal de la localidad.
Mañana, en el Pabellón Municipal de los Deportes del Ayuntamiento de Friol se le impondrá la Medalla al Mérito Policial a título póstumo al agente José Antonio Villamor, cuyo cuerpo también fue rescatado también del mar, seis días después de su desaparición.
