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viernes | 19 abril | 2024
Un día después de que el Ayuntamiento sacase a contratación las obras de reforma del edificio Boandanza de Cáritas, los trabajos ya tienen una fecha de inicio para febrero del próximo año. Así lo confirmaban ayer fuentes de la organización benéfica, que ha cedido las instalaciones de su local social de jubilados para reconvertirlo en un centro de día y mejorar su accesibilidad.
El comienzo de las obras es perentorio, puesto que la reforma no podrá retrasarse más allá del 31 de diciembre de 2013, que es el plazo dado por la Unión Europea para concluir todos los proyectos enmarcados en el programa Urbana-C, como es el caso. En total, las obras supondrán una inversión superior a 1,4 millones para adaptar un inmueble que cuenta con una superficie de 823 metros cuadrados, repartidos en sótano, bajo, cuatro plantas altas y un bajo cubierta.
Las obras del edificio Boandanza, que comenzarán en febrero, obligan a realizar el cambio
Cáritas también ha confirmado que el nuevo centro de día –que con toda probabilidad se ubicará en una de las plantas altas– dispondrá de 40 plazas. Desde la organización también han querido dejar claro que en el centro se mantendrán todas las prestaciones del local social, que cuenta en la actualidad con cerca de 2.000 socios y una media de 200 usuarios por día.
“La gente podrá seguir yendo a tomarse el café o a las clases, o lo que sea, sin ningún problema”, puntualizaba el director de Cáritas Interparroquial de A Coruña, Vicente Iglesias.
traslado provisional
Iglesias también destacó que, con la voluntad de mantener los servicios del Boandanza, se ha buscado un nuevo emplazamiento para el comedor gratuito que hay en el centro. “En la temporada de obras vamos a trasladar nuestro servicio de comidas a una cocina-comedor que hay en Nuestra Señora del Socorro, en Labañou”, explicó el portavoz.
La parroquia cuenta con unas completas instalaciones que no se estaban utilizando y que servirán para la preparación y el reparto de comidas que realiza Cáritas y que a diario atiende a medio centenar de personas. “Nos gustaría ampliar el servicio, pero no tenemos ni personal ni material suficiente. Además hay otras entidades como la Cocina Económica que hacen muy bien esa labor”, apostilló Iglesias. n
