La cantidad de pulpo vendida en la Lonja se redujo casi un 20% este año en relación a 2017

La cantidad de pulpo vendida en la Lonja se redujo casi un 20% este año en relación a 2017
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La Consellería do Mar inició ayer la temporada de la veda del pulpo, una restricción que se prolongará hasta el 2 de julio, en un año especialmente malo para la captura de esta especie en A Coruña. Desde enero hasta la actualidad se descargó en la Lonja un 19,6% menos que en el mismo período del año pasado. Tanto el sector pesquero como los comerciantes minoristas reconocen la preocupación por la escasez y la subida de los precios. 
El patrón mayor de la Cofradía, Felipe Canosa, afirma que “no fue un buen año” para los pesqueros que se dedican al pulpo. Para ellos lo único bueno “es que tuvo buen precio”. Ahora que se cierra durante unas semanas la captura confía en que a partir de julio haya mayores cantidades porque ahora “hay mucha cría”. Los datos le dan la razón al representante del sector pesquero. Las estadísticas de la Xunta sobre la cantidad que se comercializó en el Muro desde el mes de enero hasta esta semana reflejan una caída porcentual del 19,6% . 
En estos casi cinco meses se subastaron 96.406,45 kilos de cefalópodo mientras que en 2017 el balance era de 119.996,77 kilos y ello a pesar de que tampoco era de los mejores. 
Lo único que ha compensado a los armadores es el reajuste del precio, pues muchos consumidores quieren disfrutar de este alimento típico de la dieta gallega con independencia de que salga más caro de lo habitual. Aunque en este 2018 se movieron muchos menos kilos, el retorno económico fue de más de 200.000 euros por encima del volumen de 2017. El precio medio ha pasado de los 6,01 euros el kilo en el Muro a los 9,86 euros, a los que los minoristas y los supermercados deben sumarle impuestos como el IVA. 
Con estos costes de partida muchos pescaderos de los mercados coruñeses han optado por mantenerse alejados del pulpo, pero también hay quien confía en las ventas. Ayer en la plaza de Lugo había quien lo tenía pese a que salió muy caro de las subastas. “La gente está desencantada porque esta especie no se recupera”, resume el responsable del departamento de cancha de la Lonja, Ignacio Iglesias, que coincide en resaltar la carestía.

La cantidad de pulpo vendida en la Lonja se redujo casi un 20% este año en relación a 2017

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